Las notas musicales de Mi Mary, Tania, La rebelión, entre otras, sonaron en el piano de Chelito de Castro, durante el lanzamiento del Museo Joe Arroyo, un espacio educativo, histórico y sensorial que busca mostrar el legado cultural del cartagenero adoptado por Barranquilla.
Las hermanas Arroyo Alonso, por ser legítimas herederas del legado del creador del Joesón, podrán exponer en el museo las piezas que le pertenecieron en vida.
'Este proyecto cuenta con toda la legalidad para su funcionamiento, dado que constituimos la Fundación Joe Arroyo, y las piezas que se mostrarán en el museo son auténticas', afirma Eykol Arroyo, hija mayor de Joe.
En la 'casona de la 38', como es conocida la casa en la que vivieron el Joe, Mary Luz Alonso y sus hijas, estará ubicado el museo que pretende mostrar al cantante en sus diversas facetas.
'Aquí encontramos fotos inéditas de Álvaro con diversos amigos que lo visitaban, además vamos a hacer una muestra especial del vestuario que utilizaba en sus presentaciones, los afiches de los diversos festivales a los que fue invitado en todo el mundo', afirma Alonso.
De igual manera, las hijas del artista se encuentran trabajando en la Fundación Joe Arroyo. 'Nace de las reflexiones que tuvimos con mi papá y de su deseo por retribuir la generosidad hacia los jóvenes músicos, que son empíricos, así como la que él recibió por parte de Fruko y otros artistas que lo apoyaron en los inicios de su formación musical', cuenta Nayalibe Arroyo, hija del artista.
Todos los barranquilleros y foráneos tendrán la posibilidad de vivir la ‘experiencia Joe Arroyo’, denominada así por sus hijas Eykol y Nayalibe Arroyo.
'Cuando los visitantes recorren los rincones del museo, pueden encontrar testimonios, pertenencias y materiales audiovisuales exclusivos que guardamos de mi papá, miles de anécdotas y recuerdos en el que fue su hogar por más de 20 años', manifiesta Eykol.
En el lanzamiento del museo estuvieron presentes el músico Chelito de Castro y la diseñadora de modas Amalín de Hazbún, quienes fueron amigos cercanos de Joe y su familia.
'Es importante que la gente conozca el legado musical y cultural que Joe dejó a esta ciudad y a Colombia entera, estamos trabajando para que esto no muera', afirma Chelito.
Por su parte, la aguja de oro de Colombia, Amalín de Hazbún contó entusiasmada diversas historias del artista cuando diseñó gran parte de su vestuario. 'Joe era un ser original desde su voz hasta sus trajes'.