La Ley 1625 de 2013 establece que un área metropolitana es una entidad administrativa de derecho público formada por un conjunto de dos o más municipios integrados alrededor de un municipio núcleo (metrópoli), los cuales están vinculados entre sí por “dinámicas e interrelaciones territoriales, ambientales, económicas, sociales, demográficas, culturales y tecnológicas”, por lo que se requiere de una administración coordinada para la programación de su desarrollo sustentable, desarrollo humano, ordenamiento territorial y para la racional prestación de servicios públicos.
En Colombia han sido configuradas y/o reconocidas 10 áreas metropolitanas, entre las cuales figura la que integran Barranquilla, Soledad, Malambo, Galapa y Puerto Colombia, que aglutina a más de 2.100.000 personas.
Ricardo Restrepo, gerente del AMB, explicó que la fuente de los recursos que maneja la entidad se nutren de los aportes obligatorios de los municipios que la integran, además de los que percibe como accionista de Metrotel y los que llegan por un acuerdo transaccional con esta misma empresa a 20 años, a raíz de la terminación del contrato de telefonía pública.
El Distrito de Barranquilla es el que hace las mayores transferencias –aproximadamente $7 mil 500 millones fijos anuales–. Galapa y Puerto Colombia también entregan cumplidamente lo que les corresponde –$200 millones anuales–, mientras que Soledad, que está en Ley 550 aspira a ponerse al día este mes con la entrega unos $550 millones caídos. Malambo tiene una deuda por $1.230 millones, para lo cual tramita un crédito.
“Hemos hecho un llamado de atención al gobierno frente a nuestra fuente de financiación, dada la pobreza y la difícil situación financiera que afrontan muchos de nuestros municipios”, dijo.
Carlos Escobar De Andreis
Arquitecto, experto en planeación estratégica y consultor en proyectos de desarrollo social.
Cuatro competencias. El presidente López Michelsen promulgó en el 78 el decreto 1503 que estableció las áreas metropolitanas de Colombia y, a través del artículo 16, creó el Área Metropolitana de Barranquilla, Cali, Medellín, Pereira y Bucaramanga. Roberto Pacini Solano, alcalde entre 1978 y 1981, comenzó la gestión ante la Asamblea y fue así como la Ordenanza 03 del 81 consolidó el AMB, pero con 4 municipios: Barranquilla, Soledad, Malambo y Puerto Colombia. No estaba incluida Galapa, que entró después, con Barranquilla como ciudad-núcleo, pues era la de mayor número de habitantes. Las competencias que en ese momento le otorgó la ley fueron: definir y orientar la planeación en el entorno metropolitano, regular los servicios públicos en los municipios del área, financiación y dar apoyo a iniciativas de interés común, y dictar las políticas públicas que permitan organizar el ordenamiento territorial de los municipios del área.
No se han cumplido. Ninguna de esas competencias se cumplió. En el caso nuestro, ninguna. Es la hora, con todo el tiempo que ha pasado, que no se cumplen cabalmente, a pesar de que se han dado algunos cambios en términos del manejo del AMB en los últimos 4 o 5 años. ¿Por qué? Porque el ente era visto como una especie de cartera con unos recursos a los que los municipios debían llegar para ver qué posibilidad había de sacar algunos pesos para aplicárselos a proyectos que eran de su interés particular. Es decir, la entidad tenía unas funciones eminentemente políticas en función de los intereses políticos de los alcaldes de los municipios que la integran. El Área fue como un instrumento para aplicar e invertir algunos recursos, fundamentalmente en Barranquilla. Aún hoy uno no se explica cómo el Área pudo haber estado haciendo puentes peatonales en la Circunvalar.
Por una visión integral. La planeación en los municipios del Área Metropolitana de Barranquilla va cada una por su lado, para donde jalen los alcaldes. Hoy no hay visión integral; lo que existe es una sumatoria de visiones de cada municipio. No hay ningún tipo de complementariedad, ni de trabajo conjunto. Es urgente que se logre diseñar una visión metropolitana de desarrollo, una visión territorial o regional, teniendo en cuenta que la metropolización es un hecho contundente, irrefutable e irreversible que están llevando todas las ciudades del mundo.
Temas metropolitanos. Otros temas estratégicos de orden metropolitano, además de seguridad y movilidad, son la responsabilidad con los límites. Hoy todavía se están discutiendo los límites con Puerto Colombia, con Soledad y Malambo. Eso hay que resolverlo. Los alcaldes del área deben sentarse a hablar, de igual forma, sobre el daño que puede hacerle una ciudad a otra en términos ambientales: Barranquilla echa todos sus desechos al arroyo León, o arroyo Grande, ¿y eso para dónde va? Pues para Puerto Colombia. Ahí debe intervenir la Corporación Autónoma del Atlántico y hay que revisar los Pomca para lograr una integración. En materia de educación, en los colegios que están pegados a la Circunvalar el 30% de su población escolar es de Soledad y Malambo. ¿Qué hace la gente? Para que nos los rechacen por ser otra parte, se consiguen una dirección en Barranquilla, la dan en los colegios y los reciben. Igual sucede con la salud y con el Sisbén: la gente está falseando la información. Pero, ¿quién cobra los recursos que se reciben del gobierno por educarlos o atenderlos? Barranquilla, no es Soledad, ni Malambo. Ahí hay un conflicto para resolver.
Mayor actitud hacia la integración. ¿Quién va a tomar el liderazgo en los proyectos de alto impacto metropolitanos regional? ¿Los alcaldes? ¿O los alcaldes a través del AMB? ¿Van a hacer la fuerza conjuntamente con el Gobernador? Creo que hoy los alcaldes de los municipios del Área Metropolitana entienden que hay un proceso de desarrollo urbano territorial que necesariamente lo lidera Barranquilla por ser la más grande y la que maneja más recursos. Ellos están a la expectativa de la experiencia que se está dando a todo nivel. La situación siempre va a ser compleja, más no difícil, pero creo que hoy las condiciones están dadas para que se desarrolle una propuesta de visión integral metropolitana. Sin duda, hay mayor actitud hacia la integración.
Gregorio García
Arquitecto, exdecano de la facultad de Arquitectura, Arte y Diseño de Uniautónoma.
Desconocimiento. Cuando se inicia el Área Metropolitana en Barranquilla, la gente no tenía conocimiento de la entidad, ni de sus funciones, ni de dónde iban a salir los recursos para que funcionara. Y a pesar de que esta entidad con el tiempo se ha posicionado y se mantiene vigente, en ciudades como Medellín y Bucaramanga, por ejemplo, le han dado la importancia, cuenta con los recursos y ha liderado grandes procesos, como corresponde. Acá de alguna manera no ha sido tan expreso el impacto del ente, porque los mismos municipios tienden a querer mantener una autonomía de su territorio y desconocen que básicamente esa entidad está hecha para fortalecer todos los procesos que puedan ser compatibles para estructurar integralmente un desarrollo.
Visión metropolitana. De hecho algo que es importante es que en nuestro departamento la lectura del territorio incluye litoral, riberas, un canal, todo lo cual ofrece condiciones muy particulares. Hay una frontera sobre el Magdalena y no lo vemos así porque nos quedamos solo hasta la ribera del río y no alcanzamos a ver todas esas dimensiones que, con la lectura y la observación metropolitana, se podría articular desarrollo y proyecciones importantes a nivel de la región en su conjunto.
Coordinar actores. Sería interesante, dado el impacto que tienen todas obras que se vienen para Barranquilla, con la recuperación del río y con la nueva dimensión que se le dará a la actividad portuaria; cuando se discute cómo hacer eficiente el transporte masivo e, inclusive, las mismas redes del servicio de energía; cuando se habla de seguridad, etcétera, que el Área Metropolitana sea el ente llamado a coordinar los diferentes actores que intervienen y que en nuestros cascos urbanos tienen una dinámica casi que desbordante.
Fortalecer el AMB. El Área debería ser fortalecido con las competencias pero también con recursos económicos y técnicos. De hecho la entidad está promoviendo un observatorio metropolitano, que es algo muy importante. Me llama la atención son las convocatorias para exponer los planes, pero a veces me sorprendo porque llegan de Bogotá y nos dicen: este es el nuevo puente; están son las vías, cuando debería ser el AMB la entidad que lidere eso.
Ricardo Mario Plata Sarabia
Ingeniero industrial. Director ejecutivo de la Corporación Empresarios de Oriente
Dependencia de Barranquilla. Quisiéramos que el Área Metropolitana de Barranquilla tuviera más dientes, más posibilidades, más recursos y más capacidad técnica, porque hay una dependencia muy fuerte de Barranquilla, que es el municipio que más aporta recursos para los gastos de funcionamiento legales de la entidad. Anteriormente el AMB tuvo visos de fortín político burocrático con un manejo netamente político. Ahora, en la última administración se ha ido profesionalizando y tiene una mayor capacidad técnica, pero le falta mucha autonomía. La dependencia del Distrito hace que el área no tenga la capacidad de representar el interés colectivo de la región de su influencia.
Transferencia de buenas prácticas. La Alcaldía de Barranquilla ha hecho muy bien la tarea de empezar a generar una institucionalidad más fuerte con respecto al tema de seguridad, alineando a los actores que no conversaban entre sí; alineando la información, que no existía y creando un plan integral de seguridad y convivencia y un plan maestro de equipamientos. Todo esto tiene una visión metropolitana, aunque los recursos estén focalizados en Barranquilla, pues son suyos. Teniendo en cuenta esto, lo que queremos es ver cómo logramos que la ciudad transfiera esas buenas prácticas a los municipios de su entorno. Es que los bandidos no discriminan si delinquen en Barranquilla, Galapa o Puerto Colombia. Y no nos olvidemos que la Policía es la única entidad que tiene carácter metropolitano .
En movilidad. Adicionalmente al tema de seguridad, puede haber una injerencia positiva del AMB en movilidad. Y la oportunidad de oro está dada en el Transmetro. El próximo paso está en las dos siguientes fases de ampliación del sistema, como fue originalmente concebido: por la calle 30 hasta el aeropuerto y por la Cordialidad. Ese es un imperativo que trasciende la capacidad del Distrito, por lo que requiere de una voluntad conjunta, coliderado por la Gobernación, y articulado por el AMB.
El caso Soledad. Yo me atrevo a decir que Soledad es el municipio del área que más ayuda necesita, tanto técnica, como financiera. A Soledad no podemos seguir dejándola sola, con funcionarios que tienen muy buena voluntad, pero que no cuentan con los recursos ni con la capacidad técnica para resolver sus problemas, que son grandes. Son 750 mil habitantes; no existe estrato 4 en su ordenamiento territorial, hay serios problemas de servicios públicos, una pobreza altísima y no tienen cómo recoger recursos para atacar la complejidad de sus problemas. El llamado es al gobierno nacional, pues esta es la octava ciudad del país, la cual está conurbada con Barranquilla, que es la cuarta. Si a Soledad le va mal, a Barranquilla le va mal. Los otros municipios también tienen dificultades, pero requiere un plan de choque urgente.
Los retos. La coyuntura es buena para este diálogo. Se nos vienen unos procesos de planeación regionales y una grandes obras con las que vamos a ver un panorama de habitabilidad de la ciudad-región muy distinto en 4 o 5 años. Y tenemos que planear bien, porque la planeación no da votos, no genera noticias, pero da calidad de vida.
Origen
En la reforma del 68
A finales de los 60, siendo presidente Carlos Lleras Restrepo, el 40% de los 36 millones de colombianos de ese momento estaba concentrado en las cuatro principales ciudades y existía la tendencia que el fenómeno se fuese incrementando. Es entonces cuando el gobierno incluye en la reforma de la Constitución Nacional de 1968 la creación de las áreas metropolitanas en Colombia, entendiendo que era necesario pensar en una fórmula para racionalizar la aplicación de las normas de planificación, la regulación de los servicios públicos y la prestación de algunos apoyos o servicios para los municipios más pequeños.
Puerto Colombia
*Se ubica en una zona costera, muy cerca de los puertos del Caribe.
*Parte de su territorio se caracteriza por ser un corredor educativo que alberga colegios y universidades.
*Su actividad económica se orienta al turismo gracias a 6 playas de referencia en el Atlántico.
Galapa
*Tiene una posición geográfica estratégica, lo que la convierte en un conector logístico industrial.
*Se destaca por contar con una buena conectividad vial.
*Importantes industrias se han instalado en el municipio como la Zona Franca Internacional del Atlántico, Zofia.
Barranquilla
*Es considerada la cuarta ciudad del país y la más importante del Caribe colombiano en materia portuaria.
*Por su posición estratégica en la Costa norte Colombia, y por su cercanía con EEUU y Panamá, se ha posicionado como una importante plataforma para el intercambio comercial.
Soledad
*Agrupa industrias nacionales y extranjeras de diferentes sectores, como farmacéutico, químico y energético.
*Es la tercera ciudad más poblada de la región Caribe.
*Se destaca en materia de infraestructura por el aeropuerto Ernesto Cortissoz, la terminal de transportes y la Gran Central de Abastos.
Malambo
*Cuenta con un recurso hídrico de invaluable valor en la ciénaga de Malambo.
*Su cercanía al río Magdalena ha hecho posible el desarrollo de la industria y del parque industrial Pimsa que cuenta con 27 compañías.