Un cohete Falcon 9 de la compañía aeronáutica SpaceX con una nave en la que viajan dos astronautas de la NASA despegó este sábado desde Cabo Cañaveral (Florida) en el primer vuelo espacial privado a la Estación Espacial Internacional (EEI) desde suelo estadounidense en nueve años.
A las 15.22 hora local (19.22 GMT) el cohete despegó desde la plataforma 39A del Centro Espacial Kennedy ante la presencia del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, después de que el pasado miércoles se cancelara el lanzamiento por culpa de las malas condiciones meteorológicas.
A bordo de la cápsula Crew Dragon, situada en la punta del cohete, viajan Doug Harley y Bob Benhken, dos astronautas que participaron en las misiones de los transbordadores canceladas por la NASA después del viaje del Atlantis en 2011.
'Es absolutamente un honor para nosotros formar parte de este gran esfuerzo de volver a poner a Estados Unidos en el mercado de los lanzamientos espaciales', dijo Behnken unos minutos antes de despegar.
'Gracias por todo el trabajo que han hecho y poner a Estados Unidos de nuevo en la órbita terrestre desde la costa de Florida', añadió Hurley ya desde el espacio.
Las previsiones del escuadrón 45 de la Fuerza Aérea estadounidense inicialmente auguraban un 50 % de probabilidades de que se pospusiera el lanzamiento hasta el domingo, cuando se esperaba que las condiciones climáticas mejoraran considerablemente, pero el tiempo dio una tregua y permitió el despegue del cohete.
Tan solo siete minutos antes de que finalizara la cuenta atrás se dio la definitiva luz verde para el despegue tras la última actualización meteorológica.
El ascenso, que duró un total de nueve minutos, se produjo sin complicaciones hasta los 200 kilómetros de altura cuando los propulsores de la nave entraron en funcionamiento.
Doce minutos después del despegue, la cápsula Crew Dragon se separó completamente de la segunda parte del cohete Falcon 9 y puso rumbo a la EEI dónde los astronautas pasarán entre seis y dieciséis semanas realizando investigaciones técnicas y científicas antes de volver a la Tierra.
A su vez, el cohete Falcon 9 aterrizó en la plataforma 'Por Supuesto Todavía Te Quiero' del océano Atlántico a las 15.33 hora local (19.33 GMT).
Unas 19 horas después del despegue se espera que la nave atraque en la EEI en lo que será la conclusión de una misión que abre el camino a la comercialización de la órbita terrestre y, de tener éxito, la NASA certificaría la capacidad de realizar vuelos espaciales de la compañía fundada por Musk, creador también de la compañía de automóviles eléctricos de lujo Tesla.
Una vez que los astronautas vuelvan a la Tierra, el próximo lanzamiento está planificado para el 30 de agosto, cuando comenzarían las misiones operacionales de la NASA con ayuda de SpaceX, y dejarían atrás estos nueve años en los que Estados Unidos precisó de los sistemas de lanzamiento rusos como el Soyuz para enviar a sus astronautas al espacio.