Líderes internacional encabezados por el jefe del Gobierno español, Pedro Sánchez y el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva se reunieron este martes, en el marco de la Asamblea General de Naciones Unidas, para impulsar una reacción sostenida contra los extremismos y la desinformación.
De acuerdo con la agenda, el presidente Gustavo Petro haría parte de esta importante reunión en la que también se habló sobre promover el crecimiento económico, inclusión social y derechos humanos; sin embargo, el mandatario no se presentó.
Se trató del Foro en Defensa de la Democracia en el que sí participaron el presidente francés, Emmanuel Macron; el de Chile, Gabriel Boric; el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau; o el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel.
Los dos impulsores del encuentro llamaron en su intervención en ese foro a unir fuerzas para hacer frente a los extremismos y todos los participantes secundaron esa apelación y abogaron por mantener nuevas reuniones en las que abordar este asunto.
A pesar de la ausencia del presidente Petro, Colombia fue representada por el canciller Luis Gilberto Murillo, quien durante su intervención que el progresismo debe ser más “potente en la crítica de algunos desafíos globales”.
“Responder ante las necesidades de la gente, proveer soluciones porque a veces la desinformación encuentra terreno abonado (...) el progresismo tiene que hacer un nuevo planteamiento, tiene que ser más potente en la crítica de algunos desafíos globales como la educación y el racismo”, expresó el canciller Murillo.
Por su parte, el presidente Boric abundó en esa idea y ofreció Santiago de Chile para una próxima reunión que dé continuidad a la que se celebró este martes en Naciones Unidas.
Además, el presidente Lula consideró “innegable” que la democracia vive en la actualidad su momento más difícil desde la Segunda Guerra Mundial ante unas prácticas que mezclan noticias falsas, racismo, xenofobia y desinformación.
A su juicio, las democracias son imprescindibles y debe hacerse de ellas el camino más eficaz para lograr derechos y no caer en las narrativas de la ultraderecha que considera “una trampa”.
Sánchez defendió que la lucha contra los extremismos y la desinformación sea continuada y por ello llamó a una movilización y actuación conjunta que haga frente a los discursos que la socavan y responder con la misma tenacidad que demuestran esos movimientos.
Macron señaló que es una evidencia que los extremismos están creciendo y por ello dijo que es necesario crear “unos nuevos anticuerpos” para protegerse de ellos.
De otra parte, Trudeau llamó también a levantarse para trabajar juntos y vencer a los extremismos porque advirtió de que el autoritarismo está contaminando sociedades de todo el mundo.