Colombia acoge desde el próximo lunes 21 de octubre y hasta el 1 de noviembre la COP16 de Biodiversidad, un encuentro bajo el paraguas de la ONU en el que los países del mundo discutirán y negociarán acuerdos para proteger la naturaleza y ponerle freno a la destrucción de los recursos naturales del planeta.
“La protección del Caribe biodiverso la construimos todos con más autonomía territorial y fiscal”
Cali es la ciudad escogida por el gobierno del presidente Gustavo Petro, que ha hecho una gran apuesta por esta cumbre con la ministra de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Susana Muhamad, a la cabeza, y hasta el momento 14 jefes de Estado han sido confirmados para participar.
“Somos el epicentro de las negociaciones más importantes para la conservación de nuestro planeta. Con 14 jefes de Estado, más de 100 ministros de Ambiente y 18.000 personas acreditadas, lograremos un acuerdo histórico para la biodiversidad”, dijo Muhamad.
A su vez, el canciller Luis Gilberto Muriilo afirmó que la COP16 “es el evento más importante en el contexto internacional que ha tenido el país como sede en Cali. Ya tenemos a 130 ministros y ministras confirmados, de los cuales 110 son ministros y ministras de ambiente, 150 delegaciones, participación de jefes y jefas de gobierno, de ministros y ministras de Hacienda, de una gran llegada de la sociedad civil internacional, académicos, organizaciones ambientalistas, organizaciones que están asociadas a lo climático. Por parte de algunos gobiernos se nos confirmó su adhesión a la declaración de paz con la naturaleza, un llamado por la vida”.
Murillo indicó que “asimismo reportamos que tenemos cerca de mil periodistas nacionales e internacionales ya acreditados para cubrir la COP16. Así que tenemos mucho entusiasmo en el recorrido, en la gira que hice hace poco se confirmaron las delegaciones de países muy importantes, que van a tener una delegación muy nutrida, del más alto nivel, como el Reino Unido, Alemania, la República Popular China. Vamos a tener realmente una COP que nos va a hacer sentir orgullosos como colombianos”.
Entre tanto Petro destacó que en la COP 16 de Cali “muchísimos pueblos lo que van a buscar es unirse y es esa unidad de los pueblos lo único que nos puede salvar”. Y reconoció que muchos pueblos se van a unir, para buscar la salvación de las naciones más afectadas “como en nuestro país, porque en este reinado del verde que es nuestro país, el país de la belleza, surgirá es un desierto, si en unas décadas no se ha frenado la codicia en el planeta y también en nuestro país: sacar petróleo de la selva, oro de la selva, extinguir los ríos, en la minería ilegal y en la legal, acabar el agua”.
Importante: COP16: un espacio para impulsar la defensa de la biodiversidad
Y concluyó que es “quizás el principal evento que Colombia ha hecho a nivel internacional. Solo la República Popular China, por ejemplo, va a enviar 300 funcionarios, solo ese país y tendremos la mayor parte de delegaciones de los gobiernos del mundo, de las culturas del mundo, de las representaciones de los pueblos del mundo”.
Qué es una COP
Se trata de una Conferencia de las Partes (COP, por sus siglas en inglés), una reunión internacional donde los países se juntan para discutir y tomar decisiones sobre temas ambientales a nivel global.
En 1992, en la Cumbre de la Tierra de Río de Janeiro nacieron tres convenciones: la de cambio climático, que se celebra cada año y es la más conocida, la de biodiversidad y la de desertificación, estas últimas de carácter bienal.
Este año coinciden las tres: la COP29 de cambio climático que se desarrollará entre el 11 y el 22 de noviembre en Bakú (Azerbaiyán); la COP16 de Biodiversidad, que tendrá lugar en Cali (Colombia) y la COP16 de desertificación, del 2 al 13 de diciembre en Riad (Arabia Saudí).
La COP de Colombia
La edición 16 de la COP de Biodiversidad llega a Colombia después de que Turquía, que iba a ser la anfitriona, renunciara a celebrarla por cuenta de la emergencia sufrida por los terremotos de 2023. Desde entonces, el Gobierno colombiano ha hecho de esta reunión una de sus banderas.
Esta cita reunirá a más de 190 países, organizaciones observadoras, grupos de jóvenes, sociedad civil, academia y público en general y Cali se dividirá en dos para acogerlos: la Zona Azul será el espacio institucional donde se llevarán a cabo las negociaciones de alto nivel y participarán los jefes de Estado invitados, y la Zona Verde, que será el escenario donde se desarrollen las actividades de las organizaciones y la sociedad civil.
Qué se discutirá en Cali
El foco estará puesto en la implementación del Marco Kunming-Montreal, aprobado en la última cumbre, celebrada en Canadá, cuyo objetivo principal es proteger el 30 % del planeta, incluyendo áreas terrestres, marinas y de agua dulce, convirtiéndolas en áreas protegidas para el final de esta década y la restauración del 30 % de los ecosistemas degradados.
Además, el Marco pone énfasis en la restauración y protección de ecosistemas críticos, como las selvas tropicales y los humedales, que son esenciales para la biodiversidad y el equilibrio climático.
Lea aquí: La COP16 y su trascendencia para la biodiversidad de la región Caribe
Colombia ha marcado tres metas para esta cumbre: la financiación del cumplimiento de las metas climáticas, que la ministra ha admitido será el punto más crítico de las negociaciones; establecer un marco de acceso a beneficios de las cadenas genéticas digitalizadas y los recursos genéticos, y la evaluación de las acciones de los países para el cumplimiento de las 23 metas de biodiversidad a 2030.
“Paz con la naturaleza”
“Paz con la naturaleza” es el lema escogido por Colombia y con el mensaje: “La naturaleza nos hace la última advertencia para detener esta guerra suicida. Bosques arrasados, tráfico de animales, minería ilegal, especies extintas, ríos y mares contaminados. Todos estamos llamados a la acción y tenemos la oportunidad de ser parte del cambio”.
Por otro lado, el Ministerio de Ambiente ha enfatizado la participación de los indígenas con multitud de eventos previos y movilizaciones con la mira puesta en la aprobación de un plan de trabajo global para los pueblos étnicos como custodios de la biodiversidad.
La seguridad
Los ojos han estado puestos en los últimos meses en la seguridad en el Valle del Cauca, uno de los departamentos donde la violencia más se ha recrudecido tras los desencuentros del Gobierno con los grupos armados. Es, además, vecino del Cauca, bastión del Estado Mayor Central (EMC), principal disidencia de las FARC.
En este contexto, el Gobierno ha reiterado que está garantizado el normal desarrollo de la cumbre con una amplia operación de seguridad a la que se suma la Policía de la ONU que custodiará la Zona Azul.
Sin embargo tras la ofensiva del Ejército contra una facción del EMC en el caserío de El Plateado el pasado fin de semana, ese grupo amenazó a la COP16 y recomendó “a los delegados de la comunidad nacional e internacional abstenerse de asistir a este evento”.
Ante esa amenaza, Petro respondió en un mensaje en X: “La seguridad de la COP16 está garantizada”.
Relacionado: Ciénaga de Mallorquín, un tesoro natural que ha vuelto a brillar en Barranquilla
“Una oportunidad para mejorar protección de defensores ambientales”
La celebración de la COP16 es “una oportunidad para mejorar la protección de los defensores ambientales”, asegura la representante en el país del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Juliette De Rivero, después de que un informe de Naciones Unidas revelara que desde 2016 fueron asesinados 248 líderes ambientales colombianos.
“Nos preocupa mucho que 248 defensoras y defensores ambientales hayan sido asesinados desde el 2016 hasta septiembre de este año (...) y realmente preocupa que, los actores armados en particular, ejerzan tanta violencia contra ellos, que están tratando de proteger sus territorios, sus ecosistemas, su biodiversidad y sus recursos naturales”, dijo De Rivero en una entrevista con la agencia de prensa EFE a cuatro días del comienzo de la cumbre.
En Colombia, continuó, “existe una falta de protección en estos lugares” y “se tiene que mejorar muchísimo la coordinación del Estado para proteger a los defensores ambientales y, en particular, a los defensores indígenas, de las comunidades afro y campesinas”, ya que representan el 89 % de los asesinatos documentados por la ONU.
Esto se debe, en gran parte, a que existe “un problema muy grande de inseguridad en los territorios y los actores armados, que ocupan mucho de estos territorios, tienen intereses que tocan directamente los recursos naturales” de estas regiones, lo que pone a los liderazgos ambientales en su punto de mira.
El informe publicado el pasado jueves por la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos señala que en los últimos años se “ha observado un incremento en los homicidios de personas defensoras del medioambiente”.
Mientras que en 2016 fueron asesinadas 14 personas, en 2023 la cifra de asesinatos fue de 44, el año más mortífero.
Además, el Pacífico colombiano es la región más mortífera, con 138 líderes asesinados, y precisamente la que acogerá la COP16, lo que permitirá observar “la labor muy importante que hacen las defensoras y los defensores del medioambiente en esa parte del territorio colombiano y el respaldo que necesitan porque muchos son estigmatizados y se encuentran en una situación de vulnerabilidad muy aguda”, según la experta.
En este contexto, De Rivero resalta que el actual Gobierno colombiano “tiene un compromiso muy fuerte con los derechos humanos y la protección del medioambiente”, con la reciente aprobación del Acuerdo de Escazú, por ejemplo, pero lamenta que “esas políticas todavía no se han traducido en realidad en los territorios” y reitera el llamado al Estado a “articularse para brindar mayor seguridad”.
Precisamente uno de los ejes impulsados para la conferencia de biodiversidad por el Gobierno como anfitrión es la participación de los pueblos indígenas y de la sociedad civil, bajo la idea de “la COP de la gente”.
Por eso, De Rivero considera que “por primera vez en esta COP se va a tratar de centrar la discusión en torno a la protección de los derechos humanos y las personas ambientalistas” y resaltó que es el momento perfecto para “empezar a visibilizar esas luchas, que necesitan el respaldo de la comunidad internacional”.
“Colombia tiene que proteger su biodiversidad, que realmente es una gran riqueza geoestratégica (...) Colombia tiene la riqueza de, justamente, sus organizaciones sociales, de sus defensoras y defensores de derechos humanos, que son muy valientes, y eso es una riqueza para construir un planeta y un país con mayor seguridad, con paz y con respeto hacia el medioambiente”, señala.
La funcionaria de la ONU concluye con una reflexión sobre las cifras de asesinatos de líderes ambientales: “Es una señal de alarma para Colombia y el hecho que se organice la COP16 acá es una oportunidad para mirar esta situación y mejorar la protección para las defensoras y los defensores”.
Indígenas navegan el Magdalena de camino a la COP16
Más de 30 comunidades indígenas llegaron el pasado jueves a Bocas de Ceniza, en la ciudad de Barranquilla, tras recorrer más de mil kilómetros por el río Magdalena, el más importante del país, de camino a la COP16 donde presentarán la Declaración por la Madre Tierra.
Los pueblos indígenas navegaron desde el nacimiento hasta la desembocadura del río Magdalena y llegaron a Puerto Mocho, un caserío de pescadores ubicado a pocos metros de Bocas de Ceniza, lugar donde se une con el Mar Caribe, las embarcaciones con los “navegantes de la palabra” que hace 10 días partieron desde el macizo colombiano con el objetivo de construir las propuestas ambientales que las comunidades llevarán a la COP 16.
En su recorrido, la caravana fluvial realizó un ejercicio de “sanación espiritual” desde el conocimiento ancestral para pedirle perdón a la naturaleza por el daño causado al río Magdalena, el más importante de Colombia.
Lea también: La COP16 y su trascendencia para la biodiversidad de la región Caribe
“Nuestros pescadores y pescadoras están denunciando todo lo que está ocurriendo con nuestro río. Si no nos organizamos para cuidarlo y defenderlo nuestro río, irá muriendo lenta y sistemáticamente”, dijo a la agencia EFE Giovani Yule, líder indígena y director de la Unidad de Restitución de Tierras (URT).
En este sentido, Hernán Alonso Palechor, líder indígena que participa en la caravana desde el primer día, manifestó que se puede observar la gran afectación que tiene el río Magdalena durante su recorrido.
“Se va pasando de las aguas cristalinas en su nacimiento y se van volviendo más oscuras”, aseguró Palechor.
“En la parte alta florece la vida, ya desde el Huila para acá empieza a generar la destrucción. Más adelante hemos encontrado también comunidades pesqueras que han manifestado su tristeza porque ya no pueden pescar, sus valores culturales se han perdido, ya no viven de la pesca”, explicó.
Este grupo de comunidades indígenas y organizaciones sociales llegará a la COP16, donde se encontrarán con otros pueblos, para demandar que “la paz con la naturaleza no se hace desde un escritorio, se hace caminando el territorio”.
“Venimos tejiendo la palabra con el fin de que luego se convierta en una gran declaración por los derechos de nuestros espacios sagrados, como son las montañas, los páramos, los volcanes, los nevados, los mares, los ríos, los humedales, las ciénegas, todos los espacios que nos permiten a nosotros salvaguardar y cuidar nuestra madre naturaleza”, detalló Yule.
Recordando el estado del Magdalena, Pedro Martínez, quien se dedica a la pesca en el sector de Puerto Mocho, expresó que cada día es más difícil vivir de esta actividad debido a que la contaminación disminuye la llegada de las diferentes especies de pescado.
“No sabemos hasta cuando podremos aguantar, pero si las cosas no cambian ya no tendremos con qué comer”, anotó.
La agenda
Por primera vez, la cumbre más importante sobre biodiversidad en el mundo, la COP16, tendrá la Zona Verde más grande de la historia. Esta contará con un Programa de Acción y Participación que incluye las franjas académica, cultural y multicolor con más de 1.152 eventos académicos, 280 actividades culturales y dos circuitos con cuatro rutas de participación ciudadana, distribuidos en 16 escenarios dentro de la Zona Verde y espacios físicos articulados con universidades con un aforo para más de 5.400 personas por día.
“Es la primera vez que una COP de Biodiversidad va a generar una instancia abierta, plural y democrática. Serán más de 350.000 metros cuadrados para que actores de todo el mundo puedan impulsar la protección de la biodiversidad e incidir en las negociaciones”, afirmó la ministra de Ambiente.
De igual manera la COP16 tiene más de 70 eventos previos y actividades que llegan a los territorios y recogen las visiones y voces de actores del sector privado, Gobierno, autoridades locales, pueblos indígenas, comunidades afro, campesinos, organizaciones sociales, organizaciones no gubernamentales, actores internacionales, entre otros.
Dentro del programa se incluyó la Franja Multicolor para abrir los espacios de participación de las comunidades locales y regionales en la COP16, que irán desde las comunas hasta los pueblos aledaños a la ciudad. Al respecto, la vicepresidenta de la República, Francia Márquez, aseguró que dentro de la cumbre mundial “he pedido la participación activa de los territorios y comunidades del Pacífico, de las mujeres y la juventud en la COP16 y por supuesto de los pueblos étnicos. Como un gran hito de esta COP16 hemos solicitado la inclusión de la Categoría de Pueblos Afrodescendientes en el Convenio de Diversidad Biológica”.
Así mismo, el ministro de Culturas, Juan David Correa, destacó que “tendremos una variada programación artística en todos los espacios de la COP16 tanto en la Zona Azul como en la Zona Verde, y en el Distrito de Agua Blanca donde junto a las barriadas y organizaciones populares hemos organizado una COP con la Gente. Además, se realizará programación en tarimas, feria de economías populares, representaciones artísticas, entre otros”.
Por otro lado, la gobernadora del Valle del Cauca, Dilian Francisca Toro, dijo que “vamos a hacer la Declaración de Inírida, queremos es básicamente hacer una acción afirmativa para la participación y la visibilización de las mujeres en el cuidado de la vida, en el cuidado de la diversidad y en el cuidado de la naturaleza. Queremos hacer esta declaración donde las mujeres participemos por igual en las decisiones que se toman para conservar la vida y la diversidad”.
Respecto a la Zona Azul, la ministra Muhamad reiteró que la agenda oficial de la COP16 es la agenda de negociación que se acordó y se viene trabajando desde hace dos años con todos los países. Los resultados y las decisiones en torno a esa agenda se tomarán en Cali. La secretaria ejecutiva de la CDB, Astrid Schomaker, afirmó que los esfuerzos que están desplegando el Gobierno de Colombia, las autoridades regionales, la ciudad de Cali y la sociedad civil colombiana en la preparación de la COP 16 son realmente impresionantes y tremendamente apreciados.
Por su parte, el canciller de Colombia, Luis Gilberto Murillo, recalcó que esta COP16 es una gran oportunidad para consolidar el liderazgo internacional de Colombia en asuntos ambientales y como país referente entre el Sur Global. En este sentido, Colombia impulsará el lanzamiento de la Coalición Mundial de Paz con la Naturaleza el 29 de octubre.
“Nuestra voz es y será escuchada desde nuestra política de una diplomacia por la vida, por la paz, por la reconciliación con la naturaleza. Este es el escenario ideal, vuelvo e insisto para la unión del país, y para unir al país con el mundo. Una oportunidad única de trascender no solo como Colombia, sino de poner a Latinoamérica y el Caribe en el radar, para proponerle al mundo un futuro mucho mejor articulado a la protección de la naturaleza”, añadió.