Este jueves 19 de diciembre la Superintendencia de Salud anunció nuevos hallazgos sobre el desvió de dineros de la salud por parte de la EPS Coosalud.
De acuerdo al superintendente Nacional de Salud, Giovanni Rubiano, esta serie de irregularidades pudieron evidenciarse luego del débito realizado al banco GNB Sudameris, el 20 de noviembre de 2024, por un valor de 206.213.000 millones de pesos.
Asimismo, Rubiano señaló que “se evidenció que Coosalud Inversa ya tenía cuentas por pagar con Coosalud EPS” por cerca de $229.000 millones.
La Supersalud indicó también que Coosalud tiene deudas de hasta “$433.000 millones” que incluyen el “préstamo para comprar una casa. Con este dinero se hubiera podido atender a más de 645.000 pacientes en Colombia para cirugías y tratamiento de distintas enfermedades”, se lee en el trino de la entidad.
Según el superintendente, el préstamo para la compra de esta vivienda fue de $10.000 millones. De igual manera, reportó préstamos para cubrir parte de las “cuotas del crédito que se siniestró”, generando la necesidad de crear una cuenta por cobrar por parte de Coosalud Inversa.
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“Fueron afectadas las cuentas bancarias de Coosalud EPS S.A por un valor de $203.741.995 millones, denuncia realizada el 6 de diciembre”, añadió. Este valor de la cuenta por cobrar, sumado al valor cobrado por el fideicomiso del banco, daría la totalidad de $433.000 millones, que sería la deuda total de Coosalud reportada por la entidad supervisora.
“Es inadmisible que una EPS le pida a una empresa del mismo grupo empresarial que compre una casa con recursos de la salud y luego la arriende por mil millones de pesos al mes. ¡Qué barbaridad es esta! Y la gente afuera pidiendo medicamentos y citas. Esto causa indignación”, agregó Rubiano.
En ese sentido, María José Navarro, superintendente de Economía Solidaria, indicó que “la información reportada en los estados financieros de la cooperativa no es la misma información reportada ante la Superintendencia Nacional de Salud”.
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Por ello, manifestó que la Supersolidaria tomará “posesión” de la cooperativa Coosalud, dueña de Coosalud EPS y Coosalud Inversa, ya que existe inconsistencias relacionadas al número de acciones que tiene dicha cooperativa como inversa en la EPS.
Según Navarro, la diferencia sería del 50% de la participación accionaria que aparece en los estados financieros reportados a la Supersalud.
A principios de diciembre, César Negret, miembro de la junta directiva de la empresa afirmó que los más de $220 mil millones de que se hablaba entonces no se han perdido ni se han usado de manera indebida.
“La plata ni se ha perdido ni se ha refundido, ni era plata de la salud”, dijo en ese momento el empresario a la emisora Blu Radio.
El hermano del ex defensor del pueblo Carlos Negret aseguró que Coosalud fungió como garante de un crédito otorgado por el Banco Sudameris a una de sus filiales, Inversa, por un monto de $221 mil millones. Este crédito, agregó, fue respaldado mediante una fiducia y recursos propios de la EPS.
“La junta directiva aprobó una garantía legítima, y el banco aceptó la fianza tras evaluar que los recursos eran propios de la EPS y no estaban destinados a la atención de la salud”, aseveró el directivo, explicando que “el banco prepagó el crédito dos días antes de la intervención de la EPS, no porque hubiera incumplimiento, sino debido a las alertas generadas por los anuncios del Gobierno”.
Señaló que el aval aprobado por la junta no implicaba el uso de recursos destinados a la atención de los afiliados, sino recursos propios permitidos por la ley y añadió que “la junta directiva no tiene relación con Mario Urán (exasesora de Coosalud) ni con decisiones administrativas que lo involucren”.
La W Radio reportó entonces al respecto que la Fiscalía habría abierto hace un mes una supuesta indagación contra Urán y otras EPS por presuntos hechos de corrupción.
Esto por orden de la fiscal Luz Adriana Camargo, quien conformó un grupo de tareas especiales para investigar los hechos de corrupción en la salud.
Por su parte, el removido presidente de Coosalud, Jaime González Montaño, indicó en un comunicado que “Inversa es una filial de la cooperativa Coosalud creada a la luz de un plan de reorganización institucional aprobado por la Superintendencia Nacional de Salud en el año 2017 y es el vehículo para el levantamiento de capital necesario para el cumplimiento de las condiciones financieras de la EPS en lo concerniente a patrimonio adecuado y reservas técnicas, de conformidad con lo establecido en el Decreto 2702 del 2014 del Ministerio de la Salud”.
Expuso además que desde el año 2017, Coosalud se venía apalancando con el sector financiero para garantizar la operación de un sistema de salud con prima insuficiente y con carteras pendientes tanto del Gobierno Nacional y de los gobiernos locales.
“Desde el año 2022, que se inició un problema de liquidez en el sector, Coosalud desinvirtió parte de sus reservas, con lo cual generó un alivio para clínicas y hospitales. Adicionalmente, con el aumento de la siniestralidad generada por la presión epidemiológica pospandémica, se hizo necesario recurrir nuevamente a los bancos y se obtuvo recursos por valor de 221.000 millones de pesos, con los cuales se garantizaría la materialización del derecho a la salud.
Para este préstamo, de los 221.000 millones de pesos, Coosalud constituyó un patrimonio autónomo, garantizando, con recursos propios de libre destinación, el pago de este contrato, según el contrato de fiducia mercantil celebrado entre Coosalud y el Banco GNB Sudameris. Estos recursos levantados, una parte importante fue el patrimonio capitalización, que junto con otros recursos que anteriormente habían sido capitalizados, servían de garantía al crédito”.
Añade el directivo que “transcurridos aproximadamente dos años de haberse constituido la operación crediticia con el Banco GNB Sudameris, esta entidad, el pasado 12 de noviembre del 2024, oficia a Coosalud-EPS la notificación de incumplimiento del crédito y solicitud de notificación al fideicomitente.
Fideicomitente, entre las causales que adujo la entidad financiera, se encuentra, “se ha anunciado por parte del gobierno nacional y entes de control, el inicio de investigaciones en contra de Coosalud”. Como consecuencia de lo anterior, el banco decide de manera unilateral que se aporten los recursos necesarios para el pago total de los créditos vinculados y adicionalmente a eso, haciendo uso de la cláusula de aceleración de la garantía, toma estos recursos y los lleva hacia el banco.
Es importante aclarar que los recursos que el banco toma mediante el aceleramiento de la garantía son recursos que no son de salud ni son de la UPC. Estos son recursos, eran recursos propios de la EPS que habían sido constituidos como patrimonio de la EPS”.
