El ministro de Hacienda, Diego Guevara, explicó el pasado lunes en el polémico segundo consejo de ministros televisado cómo será la adición presupuestal de $2,76 billones “para impulsar la paz y el desarrollo” en el Catatumbo.
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Esta será financiada a través de tres nuevos impuestos, que anunció el presidente Gustavo Petro “con el objetivo de fortalecer la seguridad, la infraestructura y los programas sociales” en la región.
El primero es un IVA del 19 % para juegos de suerte y azar en línea, en el que se elimina la exención tributaria vigente desde 2016, “equiparando estos juegos con los tradicionales’. Se espera recaudar $1 billón en 10 meses.
El segundo es un impuesto a la primera venta o extracción de petróleo y carbón, es decir un tributo directo sobre los recursos naturales, sugerido por el mandatario.
Y el tercero un impuesto de timbre a transacciones superiores a 20 mil pesos, “que contribuirá al recaudo necesario para completar la adición presupuestal”.
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Estos fondos se distribuirán, inicialmente, para la sustitución de cultivos ilícitos: $330 mil millones para impulsar programas productivos en la región, con especial atención a zonas como el Catatumbo.
Luego, para el sector defensa serán $881 mil millones para reforzar la seguridad y garantizar la presencia del Estado en territorios estratégicos del Catatambo.
Para la educación superior irán $286 mil millones para mejorar la infraestructura universitaria y ampliar la cobertura educativa.
Frente a la infraestructura vial se destinarán $200 mil millones para la primera fase de construcción de vías, esenciales para conectar las comunidades rurales.
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En cuanto a salud preventiva serán recursos destinados a programas de promoción y prevención en salud pública.
Y en agricultura fondos coordinados con las entidades financieras del sector para impulsar la producción local.
“Los recursos estarán exclusivamente destinados al Catatumbo, conforme a las disposiciones legales derivadas de la conmoción interior. Cada medida cumple con los principios de proporcionalidad, temporalidad y conexidad. Este no es solo un ejercicio aritmético, sino un compromiso real con la paz y la reconstrucción de una región históricamente olvidada. Con esta adición presupuestal, buscamos transformar la vida de miles de familias en el Catatumbo”, afirmó el jefe de la cartera económica.
