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En medio de la aplicación de las cuarentenas estrictas en la capital del país, que se viene aplicando desde principios de julio, la ocupación de las UCI bajaron del preocupante 90%.

El pasado domingo Bogotá presentó un 93,2% de ocupación: 1.356 camas de 1.445, estaban ocupadas. Y el pasado jueves dicha ocupación bajó al 88,5%.

No obstante, la ciudad sigue en alerta roja con 98.209 contagios y 2.658 muertes.

Además, el Distrito anunció que en la ciudad se inhumarían muertos no-COVID si colapsa la capacidad de los hornos crematorios.

Por la cantidad de muertes diarias, por ejemplo 141 el pasado jueves, están a tope los hornos crematorios, públicos y privados, así como a las morgues para el almacenamiento de los cuerpos.

Por ello, Luz Camacho, de la Uaesp -ente administrador de servicios públicos en la capital-, dijo a Noticias Caracol que la red de hornos crematorios de la ciudad, compuesta por seis hornos del servicio público y siete de empresas privadas, tiene una capacidad de cremación de hasta 106 cuerpos, y que si se llega al límite 'se tomaría la decisión de inhumar individualmente a los fallecidos no-COVID. Esto significa que no serían cremados sino enterrados individualmente, en tumbas o bóvedas, como lo permiten las normas en estos casos de emergencia sanitaria'.