El presidente de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol), Eugenio Figueredo, lamentó hoy 'profundamente' el accidente que causó la muerte de dos trabajadores en el estadio donde se jugará el partido inaugural del Mundial de Brasil 2014 y aseguró que es un 'hecho aislado'.
Dos personas murieron ayer al desplomarse parte de la cobertura metálica del estadio 'Itaquerao', por una maniobra accidental de una grúa cuando 'izaba el último módulo de la estructura de la cobertura metálica del estadio', según informó el club Corinthians y la constructora Odebrecht, responsable de la obra.
Figueredo transmitió la solidaridad de 'todos los integrantes de la Conmebol' al Corinthians, y sus 'sentidos pésames a los familiares de los desafortunados trabajadores que perecieron en el infausto acontecimiento', en un carta dirigida al presidente de la Federación Paulista de Fútbol, su 'amigo' Marco Polo del Nero.
'Es un hecho aislado, que nos conmueve, conociendo el gran sacrificio que está realizando todo el Brasil, en el afán de honrar el compromiso de organizar el Mundial 2014', añade la nota fechada hoy y publicada en la web de la institución.
'Querido Marco Polo, tus amigos de la Conmebol, te acompañamos y te brindamos la mayor predisposición, si así fuere necesario', concluye.
No es la primera vez que ocurren accidentes en las obras de estadios y escenarios que serán usados para el próximo Mundial.
En junio de 2012, en el estadio Nacional de Brasilia, un operario de 21 años murió al caer de una altura de 30 metros, y en marzo de este año, en un accidente similar, un trabajador falleció en el estadio Arena de la Amazonía, en Manaos.
El pasado 15 de abril murió un obrero al caer unas vigas en las obras del estadio Palestra Italia, también en la ciudad de Sao Paulo, pero que no será sede del Mundial.