Chile. El argentino Ricardo Gareca, técnico revelación de la Copa América, tiene una trayectoria de fútbol similar a la su compatriota Ramón Díaz, al que hoy le ganó el pulso por el tercer puesto tras tener una trayectoria paralela, ya que ambos debutaron en 1978 como delanteros en su país.
Ambos lo hicieron como delanteros, aunque el Tigre' en Boca Juniors y 'el Pelado' en River Plate y en 1995, se estrenaron en el banco.
Han transcurrido veinte años desde entonces y, por otra coincidencia que les ha deparado el fútbol, la edición 44 de la Copa América los ha puesto a prueba en el rol de seleccionadores.
Al margen del tercer puesto que ha obtenido hoy Perú, la valoración positiva del trabajo de Díaz alcanza los mismos ribetes de lo mostrado por Gareca.
Díaz, quien nació en la Rioja hace 55 años, aceptó dirigir a Paraguay el 4 de diciembre de 2014 y apenas tres meses después, el 2 de marzo pasado, cuando recién cumplía 57 años, el de Tapiales dio el sí a Perú.
Ambos asumieron bajo sospecha el que ahora es el desafío más difícil de sus carreras.
Al analizar el método de trabajo de 'el Pelado' Díaz, 'vago' le llamó uno de los referentes del fútbol paraguayo, el ex portero José Luis Chilavert.
Luego debió resistir el temporal desatado llamar para la Copa América a jugadores considerados 'viejos' por sus compatriotas y dejar de lado a jóvenes que ya destacan en la Loga local.
'Si no se gana la credibilidad después de haber jugado ante Argentina, Uruguay y Brasil sin que nos pudieran ganar. Hay que tener respeto por este equipo', dijo, como sacando pecho, al aludir a los empates 2-2 con la Albiceleste, 1-1 con la Celeste y 1-1 con la Canarinha.
Faltaban horas para el choque de semifinales que Argentina ganó con una paliza de 6-1 y para Ramón Díaz quedó claro que hay que buscar recambio para sus 'viejos', que lo dieron todo en los partidos de la fase de grupos y los cuartos de final.
Solo cinco de los veintitrés convocados al torneo de Chile militan en la Liga local y ahora, al finalizar la campaña con un balance que pocos esperaban, muchos críticos piden acelerar el recambio con las figuras de Guaraní, Libertad y Cerro Porteño, que siguen siendo protagonistas del fútbol sudamericano.
En Perú surgieron chistes de dudoso gusto a partir de la figura de rockero clásico del ex jugador del América de Cali pero horas antes del partido jugado hoy un columnista agradeció al 'profesor' Gareca y le ofreció 'mil disculpas por tan poquita fe'.
Desde que llegó al banquillo de la Blanquirroja, Gareca ha pregonado que los futbolistas peruanos tienen 'todo para triunfar: técnica, física y tácticamente'.
Con la campaña cumplida en la Copa América de Chile espera ahora hacer más digerible la segunda parte de su discurso: 'Falta creer y llevar a la práctica ese convencimiento'.
No será fácil pues por el conocimiento que tiene de la cultura de los peruanos sabe que el 'entusiasmómetro' ese medidor abstracto de su optimismo fácilmente habrá pasado de ocho a ochenta. 'Tenemos que tener los pies sobre la tierra. Saber para qué estamos', advirtió.
El próximo desafío, las eliminatorias del Mundial del Rusia.
Perú no participa desde la edición de España'82, en la que cayó eliminado en fase de grupos. Y no pudo asistir a la de México'86 por culpa de 'el Tigre', que anotó el tanto agónico del 2-2 en el Monumental que clasificó a Argentina.
Gareca y Díaz ya han sentido en Chile el gusto de llevar a buen puerto a sus selecciones en su primera travesía.
Ni de cerca son parecidos, pero explorando en sus trayectorias se encuentran tantos puntos comunes como el carácter macizo que comienzan a tomar sus equipos.
Fueron goleadores y como tales saben lo que les duele a un defensor y qué es lo que incomoda a un delantero.