El atleta polaco Piotr Malachowski ha subastado la medalla de plata ganada en los juegos de Río de Janeiro para financiar el tratamiento de un niño enfermo de cáncer, Olek, quien gracias a los más de 115.000 euros obtenidos podrá recibir en Estados Unidos el tratamiento médico necesario.
'Mi medalla de plata hoy vale mucho más que hace una semana', dijo a Efe un orgulloso este lanzador de disco, que en menos de cinco días ha logrado reunir el dinero necesario para ayudar a Olek, un pequeño de sólo dos años cuya familia no tenía los recursos necesarios para sufragar los gastos médicos que requiere la enfermedad de su hijo.
'Lamentablemente el deporte se ha mercantilizado mucho en los últimos años y hoy impera otro espíritu, aunque todavía hay deportistas solidarios, con valores, que quieren ayudar a los demás y se involucran en acciones caritativas', añade este deportista, que hoy mismo se reunirá con la familia de Olek para celebrar el éxito de la subasta.
A final de mes, el menor viajará con su familia a Estados Unidos para someterse a un tratamiento especial que le ayude a superar su cáncer de ojo, explica Malachowski, quien también espera poder reunirse en los próximos días con Dominika y Sebastian Kulczyki, la pareja de empresarios que finalmente se han hecho con su medalla de plata.
'Aún no han recogido la medalla, y espero que lo hagan personalmente para poder conocernos', explica Malachowski, que asegura que no echará de menos el trofeo: 'Una medalla es sólo un pedazo de metal, pero la salud de un niño vale mucho más'.
También la familia de Olek se siente hoy 'feliz, muy feliz', como explicó a Efe su madre, Gosia, de quien partió la idea de contactar con el lanzador de disco a través de su perfil público en la red social Facebook, primero para felicitarle y después para pedirle ayuda.
'Poco después de mi participación en los Juegos me escribió Gosia, y yo no me lo pensé dos veces porque había que reunir el dinero cuanto antes, ya que en estos casos no se puede esperar, hay mucho en juego', asegura Malachowski.
A partir de ahí el atleta puso su medalla de plata en una red social de subastas, y a los pocos días la cifra alcanzó lo necesario para el viaje a Estados Unidos y el tratamiento completo.
'Ganar una medalla olímpica es el sueño de todo atleta, y por supuesto que el oro es lo más preciado. Hice todo lo posible para conseguirlo, pero lamentablemente no ha sido posible esta vez, aunque el destino me ha dado ahora la oportunidad de aumentar el valor de mi medalla de plata gracias a la solidaridad', dice el atleta.