La plusmarquista mundial de salto con pértiga, Yelena Isinbayeva, fue elegida ayer como presidenta del comité de control de la Agencia Antidopaje Rusa (Rusada), que fue suspendida por connivencia con el dopaje.
En un intento de garantizar su independencia, Rusada será financiada a partir de ahora directamente por el Estado e integrará únicamente a los comités olímpico y paralímpico ruso.
Isinbayeva fue elegida para dicho cargo dos días antes de las elecciones a la presidencia de la Federación Rusa de Atletismo (FRA), a la que también aspira la atleta, que colgó la pértiga este año.
La pertiguista decidió abandonar las pistas después de que la IAAF le impidiera a ella y al resto del equipo de atletismo ruso competir en los Juegos Olímpicos de Río debido a los reiterados escándalos de dopaje.
El deporte ruso intenta mejorar su imagen con nombramientos de antiguos deportistas para altos cargos, como es el caso del campeón olímpico de esgrima, Pável Kolobkov, designado recientemente ministro de Deportes en sustitución del criticado Vitali Mutkó.
Precisamente, el Consejo Directivo de la Federación Internacional de Atletismo (IAAF) decidió mantener la pasada semana la suspensión de la FRA, aunque sus atletas podrán competir a título individual si se han sometido a controles de dopaje independientes.