El presidente del Consejo Mundial de Boxeo (CMB), Mauricio Sulaimán, confirmó este martes que la institución entregará a héroes mexicanos en la lucha contra la COVID-19 cinturones como los que entrega a los campeones mundiales.
'Decidimos dedicarlo a héroes mexicanos que han mostrado su humanismo. Muchos han arriesgado o perdido su vida en el proceso de ayudar a los demás', señaló Sulaimán.
El CMB abrió una convocatoria para que cualquier persona del país proponga a personas con destacada actitud para evitar muertes o curar a enfermos de la COVID, de las cuales se elegirá una por cada uno de los 32 estados del país para entregarle el cinturón confeccionado por dos hermanas de la comunidad Mazahua-Otomí.
La faja verde y oro iba a ser obsequiada al ganador de la pelea entre el mexicano Saúl Álvarez y el británico Billy Joe Saunders, suspendida por la pandemia. El Consejo hizo 32 réplicas y las entregará a igual numero de lo que consideró héroes de la humanidad.
Según Sulaimán, en cada estado, además de darle el cinturón a quienes resulten ganadores en cada estado, otras 10 personas de destacada actuación contra el coronavirus recibirán medallas.
'Hay muchísimos héroes haciendo muchas labores extraordinarias en favor de la sociedad; ya sean doctores, científicos, enfermeras, camilleros, paramédicos, policías, quienes salen a repartir despensas. Por eso decidimos que el cinturón sea el concepto de gratitud hacia los que dan algo por México en esta crisis de salud, emocional y económica', expresó Sulaimán.
Las propuestas de candidatos se realizarán hasta el 8 de julio, después de lo cual una comisión designada por el CMB elegirá al ganador en cada entidad.
El cinturón, bautizado como Adolfo López Mateos, fabricado con motivos de las culturas prehispánicas, nació en 2017 para entregarse en las peleas del 5 de mayo y 16 de septiembre y volverá a entregarse en caso de que la pandemia permita la realización de una función en septiembre.
Sulaimán elogió la dedicación de las hermanas Lilia y Angélica Reyes, de la comunidad Mazahua, quienes dedicaron 250 horas para armar el cinto, una obra de arte con un proceso complicado de manufactura.