El entrenador del Barcelona, Ronald Koeman, confía en que sus jugadores recuperen, en la final de la Copa del Rey que disputarán este sábado en Sevilla ante el Athletic Club, 'la energía' que tenían antes del parón por los compromisos de las selecciones nacionales.
'No hace falta motivar a los jugadores antes de una final. Saben lo que tienen que hacer, pero hay que poner mucha energía. En los dos últimos partidos, hemos perdido un poco energía sin balón, quizás después de las selecciones, pero no es excusa', declaró en la previa de la final, que se disputará en el estadio de La Cartuja de Sevilla.
En este sentido, Koeman insistió en que, contra el Athletic, deberán estar 'defensivamente mejor colocado' cuando ataque el rival, sobre todo en transición, 'que la pasada semana ante el Madrid'.
Eso, y vigilar en las jugadas de estrategia. 'Son fuertes en el juego a balón parado, y no hay que hacer faltas inútiles en zonas de peligro', advirtió el preparador neerlandés, quien recordó que conoce muy bien al conjunto vasco, porque 'no hay secretos cuando juegas tres veces contra el mismo rival en tan poco tiempo'.
'Somos dos equipos que hemos sufrido muchos para llegar a esta final. El Ahtletic es un equipo muy competitivo y será la cuarta vez que jugamos este años. Nos ganaron en la prórroga de la Supercopa y nosotros en los dos de Liga', recordó.
Ahora, se ven las caras de nuevo con un título en juego. 'Tenemos algunos que han jugado y ganado muchas finales y deben ayudar mañana a los jóvenes. Para madurar hay que ganar finales y hay que perderlas, como pasó en la Supercopa', reflexionó el entrenador del Barça, quien tampoco quiso adelantar si mantendrá la defensa con tres centrales o finalmente regresará al 4-3-3.
Y es que para Koeman, 'el planteamiento siempre es el mismo, con tres o cuatro defensas', y éste no es otro que 'el de dominar el partido y crear ocasiones'.
E intentar ganar un título, pues es consciente de que el Barcelona es 'un club ganador' y que en la élite, aunque se siente respaldado por Joan Laporta, nunca se tiene el futuro asegurado.
'Aunque yo nunca pienso en él antes de un partido así, sino en alinear el mejor equipo', concluyó.