El francés Zinedine Zidane, entrenador del Real Madrid hasta el final de la pasada temporada cuando presentó su dimisión, está presente en uno de los palcos del Santiago Bernabéu junto a su mujer, Véronique, para presenciar el partido que enfrenta a su exequipo contra el Celta de Vigo.
Ni el técnico galo quiso perderse la vuelta al estadio madridista 560 días después de aquel 1 de marzo de 2020 en el que él era el entrenador y, sin saberlo, despidieron el Santiago Bernabéu tal y como se conocía con una victoria contra el Barcelona por dos tantos a cero tras los goles del brasileño Vinicius Junior y el hispano-dominicano Mariano Díaz.
El club presidido por Florentino Pérez optó por dejar atrás el Alfredo di Stéfano, donde jugó sus partidos como local desde la vuelta del fútbol tras el parón por la pandemia del coronavirus para dar la bienvenida de nuevo a su público a pesar de que el estadio se encuentra en pleno proceso de remodelación.
Y Zidane no quiso perdérselo. El que fuera jugador y técnico del Real Madrid, en dos etapas entre las que conquistó once títulos entre los que destacan las tres Ligas de Campeones de forma consecutiva, algo que nadie había hecho en la historia, vio tranquilamente el partido desde uno de los palcos.