El Villarreal sufrió para entrar en los octavos de final de la Liga de Campeones en un partido en el que dispuso de una cómoda ventaja de 0-3 mediado el segundo tiempo y que se le complicó con dos goles en los minutos finales del Atalanta, que estuvo cerca de empatar.
El equipo español fraguó su victoria en el orden defensivo y en la capacidad para aprovechar sus oportunidades en momentos clave, ya que el 0-1 llegó muy pronto, el 0-2 justo antes del descanso y el 0-3 nada más comenzar la segunda mitad.
A partir de entonces, el Villarreal se cayó y el Atalanta estuvo cerca de la épica, aunque no pasó del 3-2.
El primer gol, marcado en una contra por Danjuma tras un gran pase de Parejo, situó al Villarreal en el mejor de los escenarios, aunque le obligó a multiplicarse porque el acoso del equipo italiano fue total en los minutos siguientes.
A pesar de que el Villarreal se defendía con orden y con buenos marcajes, el conjunto local se desenvolvía con una energía descomunal, que mantuvo hasta el ecuador del primer periodo.
Solo a partir de entonces, tras un par de acciones individuales de Danjuma, el Villarreal se quitó de encima la presión de su oponente.
Los jugadores del equipo español empezaron a tener el balón que no habían tenido hasta entonces. El juego se niveló, las llegadas del Atalanta menguaron y el Villarreal se sintió más cómodo que en los primeros minutos del choque.
Con las fuerzas parejas y a tres minutos del descanso, un nuevo ataque del Villarreal propició el 0-2 tras un buen pase de Moi Gómez que Capoue remató con potencia desde cerca, lo que llevó el encuentro a su segunda parte con una ventaja notable y trabajada para el conjunto castellonense.
La primera llegada a puerta del Villarreal en la reanudación, en una jugada colectiva, provocó el 0-3 marcado por Danjuma a pase de Gerard Moreno.
Al Atalanta no le quedaba más remedio que lanzarse al ataque en pos de un gol que le abriera la posibilidad de soñar con la remontada, para lo que necesitaba marcar cuatro tantos. Al Villarreal le tocaba defenderse.
Pasaban los minutos y el Atalanta no se parecía al conjunto dominador del comienzo del partido, lo que facilitaba el fútbol defensivo del conjunto español, que apenas daba opciones al rival y que esperaba para hacer daño a la contra.
Sin embargo, un disparo desde la frontal de Malinovskyi a veinte minutos del final consiguió que el Atalanta metiera una marcha más a su juego para encerrar al Villarreal su parcela.
El Atalanta firmó el segundo por medio del colombiano Duván Zapata en el minuto 80.
El equipo español atravesaba el peor momento de todo el partido.
Los minutos finales fueron angustiosos para el Villarreal, que solo vio claro el horizonte a partir del tiempo de prolongación cuando a Dia se le escapó por poco el cuarto gol de su equipo.