De nuevo Mohamed Gabaski, como en octavos de final frente a Costa de Marfil, se erigió como el héroe de Egipto, que se clasificó para la final de la Copa África gracias a una excelsa actuación de su portero en la tanda de penaltis, en la que detuvo dos lanzamientos para dar la victoria a su selección.
Las paradas de Gabaski ya no son un acto de suerte para Egipto, que hace días gozó de la titularidad de su guardameta por la lesión del titular en octavos de final, Mohamed El Shenawy. Entonces, la aparición de Gabaski en la tanda de penaltis fue providencial y se ha mantenido en su sitio como un portero de garantías.
Camerún, después de Costa de Marfil, fue la siguiente víctima de Gabaski. Después de un empate sin goles, los penaltis decidieron el billete para la final y el anfitrión acabó condenado después de fallar tres de sus intentos. Harold Moukoudi y James Lea Siliki se encontraron con dos estiradas de Gabaski, mientras que Clinton N'Jie mandó a las nubes el cuarto lanzamiento camerunés. Egipto no falló ninguno y consiguió su premio.