El París Saint-Germain se dio un baño de humildad tras superar al Real Madrid en la Liga de Campeones y perdió 3-1 ante el Nantes, que mostró al conjunto blanco el camino de la remontada para el choque de vuelta.
Se presumía otra exhibición del París Saint-Germain después de sacar los colores al cuadro de Carlo Ancelotti, que el pasado martes no fue siquiera capaz de disparar entre los tres palos de su rival. Fue superado en todas las fases del partido hasta el tanto de Kylian Mbappé en el minuto 93 que acabó con la resistencia blanca.
Días después de su gran victoria, el París Saint-Germain, líder todopoderoso de la Ligue 1 con diez puntos de ventaja sobre el Olympique Marsella, se las prometía felices por su buen estado de forma y, también, por la aparición en su once titular del tridente Neymar-Mbappé-Messi después de casi 80 días sin que Mauricio Pochettino pudiera alinear a los tres juntos desde el principio.