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El danés Jonas Vingegaard (Jumbo) dio un histórico golpe de mano al Tour de Francia con una victoria en solitario en la cima del Granon que le aupó al maillot amarillo, después de destrozar en la dura subida a meta al esloveno Tadej Pogacar, víctima de una considerable 'pájara' que le hizo perder el liderato bajando al tercer puesto de la general.

Revolución en el Tour. En la misma cima a 2.413 metros de altitud donde Eduardo Chozas ganó en 1986 y Bernard Hinault se 'jubiló' como rey del Tour en favor de su compañero Greg Lemond, el turno de hazaña le tocó en la segunda visita al Granon a Jonas Vingegaard (Hillerslev, 25 años), quien incendió el Tour con un gran triunfo en solitario que le vistió de amarillo. Destrozó a Pogacar y es el nuevo rey del Tour.

Vingegaard remató la estrategia del Jumbo diseñada a través de los 151,7 km que separaban Albertville y el Col du Granon. Lo hizo atacando a 5 km de la cima del Granon, superando las terribles rampas del coloso alpino y humanizando a Pogacar, tocado y hundido ante el ataque del ciclista nórdico, quien entró desfondado con un tiempo de 4h.18.02, sin apenas poder levantar los brazos.

Etapón para recordar, en el que Vingegaard superó en 1 minuto a Nairo Quintana, en 1.11 a Bardet, a Geraint Thomas en 1.40, a Yates en 2.10, y a Pogacar, séptimo a 2.51 minutos. Un azote que fue más doloroso para el español Enric Mas (Movistar), descolgado en todo momento, cediendo en meta 8.08 minutos. Adiós podio. En la general el balear es décimo a 9.29.

Nuevo decorado en el Tour, otro patrón, otros interrogantes. Ahora llega la etapa del AlpeD'Huez con Vingegaard al frente, emocionado con su maillot amarillo y felicitado por Pogacar, no con muy buena cara. El danés lidera el Tour con 2.16 sobre Bardet, ahora segundo. Pogacar baja al tercer puesto a 2.22, seguido de Thomas a 2.26 y Nairo Quintana, muy combativo, a 2.37.

ESCAPADA CON VAN AERT, ¿ESTRATEGIA DEL JUMBO?

Primera cita alpina de alta montaña con el Galibier y Granon de colosos estelares para una esperada jornada propicia para las emboscadas al líder. Mucho calor, día de maillots abiertos de par en par, un escenario para ir a pecho descubierto. Reventar o ganar.

De inicio se fueron 20 hombres por delante, entre ellos Wout Van Aert, el maillot verde del Jumbo Visma, equipo que salió de Albertville con las ideas claras. Atacar y atacar a Pogacar hasta que cayera de maduro. Por delante Van Aert puntuó en el esprint intermedio para fortificar su maillot verde. También estaba el alemán Geschke en defensa del maillot de la montaña.

La idea del Jumbo era lanzar por delante a Van Aert y que el belga esperase acontecimientos en el grupo de los favoritos para esperar a Roglic y Vingegaard en caso de que pudiesen soltar a Pogacar. La etapa se salvó con la fuga consolidada en 6 minutos en los Lacets de Montvernier (2ª, 3,4 km al 8,2 %), espectacular carretera formada por 18 curvas en la ladera vertical de la montaña.