Sin aparente presión por ser los líderes en Italia y por atraer todos los focos en Europa, como si estuviera acostumbrado a estar en lo más alto e imbatido en Liga de Campeones y Serie A, el Nápoles volvió a exhibir una superioridad pasmosa, esta vez ante un Sassuolo (4-0) al que se impuso con un 'hat-trick' de Osihmen y un tanto de Kvaratskehlia.
Con los once habituales o con la 'unidad b', en casa o fuera, o en 'Champions' o en liga: al Nápoles no hay quien le tosa, al menos por el momento. Después de atropellar al Rangers el pasado miércoles con rotaciones, este sábado volvió a dejar patente sobre el césped del estadio Diego Armando Maradona que son candidatos a todo.
Spalletti ha conseguido crear el grupo perfecto. Ya no hay grandes salarios en un vestuario sano y todos reman en la misma dirección, conscientes y convencidos, viendo los resultados obtenidos, de que es el camino a seguir. Es la décimo tercera victoria consecutiva de un equipo sólido atrás; comprometido, creativo y eficiente en el centro del campo; y muy efectivo en ataque.