El Real Madrid busca su octava corona mundial, el quinto Mundial de Clubes desde el cambio de formato en el 2000, en una final que reconoce al mejor club del planeta en el estadio Príncipe Moulay Abdellah que enfrenta al equipo más laureado de la competición ante la revelación, Al Hilal saudí, ganador de la Liga de Campeones asiática, que cuenta con el barranquillero Gustavo Cuéllar y que dio la gran sorpresa eliminando a Flamengo.
Un título convertido en obligación para el Real Madrid. Un sueño para Al Hilal en su primera final en un Mundial de Clubes. El broche perfecto a una temporada de ensueño del equipo de Carlo Ancelotti y un impulso en el presente. Víctima de un calendario que afecta a su regularidad, con partidos cada tres días que condicionan el físico y dejan lesiones que pasan factura.
Encaró el Mundial de Clubes sin tres de sus grandes referentes en una larga lista de bajas. Con una portería sin Thibaut Courtois, una defensa sin Eder Militao y un ataque sin Karim Benzema. Los dos últimos viajaron a Rabat tras el triunfo para apurar sus opciones. Serán duda hasta el final, con mayor necesidad en el regreso de un 9 puro como Benzema pese a los cuatro tantos de semifinales que dieron forma a un resultado engañoso tras momentos de dificultad ante Al Ahly.
Alejado del foco de la polémica que lo persigue en España, reapareció la versión más letal del brasileño Vinícius Junior. Arropado por todos, alejándose del conflicto y las provocaciones, imponiendo su fútbol repleto de descaro. Hasta el técnico rival de la final, el argentino Ramón Díaz, le recomienda 'apartarse de lo extrafutbolístico'.
Cuatro años y un mes después de su última conquista, la que significó un récord al ser la tercera consecutiva de un Real Madrid que había cerrado una etapa de liderazgo de Cristiano Ronaldo, el conjunto madridista se planta en la final de una competición con gran dominio europeo. El favoritismo lo marca la historia. Hasta 14 de 18 ediciones conquistadas por el vigente campeón de 'Champions League'. Solamente los brasileños Corinthians, Sao Paulo e Internacional fueron capaces de alterar el orden del fútbol mundial. Nunca un equipo de otro continente.
Para extender la línea, Ancelotti volverá a apostar por Andriy Lunin en portería, tras su buena actuación de semifinales. Debe decidir como recompone una defensa en la que Militao puede ser refuerzo de última hora pero con menor necesidad de forzar. Con Dani Carvajal ya recuperado de una gripe que condicionó su suplencia, la posibilidad de pasar a Nacho Fernández al centro y David Alaba al lateral izquierdo. Era una demarcación donde sorprendió Camavinga hasta que dio muestras de debilidad frente a Al Ahly.
El mayor quebradero de cabeza actual para Ancelotti es el centro del campo. El momento de Dani Ceballos revoluciona cualquier idea previa. Pese a la mejoría física de Luka Modric. Es una decisión difícil para el técnico italiano que dejó al andaluz en el banquillo en semifinales y acabó siendo decisivo. Con Aurélien Tchouaméni como mediocentro y Toni Kroos al mando, no hay espacio para todos.
Fede Valverde se perfila como tercer integrante del tridente, lo que mandaría al banquillo a Rodrygo si Benzema fuerza para estar en la final. También recuperado de una pequeña dolencia muscular esperará sus minutos Marco Asensio. Las bajas madridistas para la gran cita serán Courtois, Ferland Mendy, Lucas Vázquez y Eden Hazard.
La demostración de que el fútbol está cambiando, lo demuestra una final que no medirá las fuerzas del fútbol europeo ante el sudamericano como en las tres últimas ediciones. Al Hilal, en su cuarta participación en el torneo, intentará impedir que el trofeo se vaya por décimo año consecutivo a Europa y que lo haga por primera vez a Asia.
Se lo ganó a pulso. Dirigido por un técnico de prestigio como el argentino Ramón Díaz, inició su camino con dosis de sufrimiento ante el anfitrión Wydad Casablanca (1-1), ante el que necesito de la tanda de penaltis final para superarlo. Se liberó de la presión en semifinales, consumando la revancha ante Flamengo, su verdugo en 2019, con una gran actuación. Explotó jugar la segunda mitad en superioridad tras la expulsión de Gérson, y venció 3-2 con el doblete de penalti de Salem Aldawsari y el gol de un delantero con pasado en España como Luciano Vietto.
Con la base de la selección de Arabia Saudí que dejó buenos momentos en el reciente Mundial de Qatar, como el triunfo para la historia ante el que se proclamaría posteriormente campeón, Argentina, y el añadido de extranjeros con experiencia como Gustavo Cuéllar, André Carrillo, Odion Ighalo, Moussa Marega o el propio Vietto, Al Hilal competirá sin complejos ante el Real Madrid en el día más importante de su historia. Campeón de cuatro 'Champions' asiáticas, está ante el momento de mayor trascendencia.
Recuperará Ramón Díaz a una de sus piezas importantes en el centro del campo, el internacional saudí Mohamed Kanno, una vez cumplido el partido de sanción tras ser expulsado por doble amonestación ante Wydad Casablanca.
Tras acabar en cuarta posición en dos ediciones del Mundial de Clubes, en 2019 y 2021, Al Hilal ya ha marcado un nuevo récord pero quiere más. Llega a la final con una racha sin perder de doce encuentros consecutivos. Será el tercer equipo de la Confederación Asiática que peleará por el título en una final tras Kashima Antlers japonés y Al Ain emiratí. A ambos los ganó el Real Madrid.
- Alineaciones probables:
Real Madrid: Lunin; Carvajal, Nacho, Rüdiger, Alaba; Tchouaméni, Kroos, Ceballos; Fede Valverde, Vinícius y Benzema.
Al Hilal: Almayouf; Saud, Jang, AL Bulayhi, Khalifah; Cuéllar, Carrillo, Mohamed Kanno; Marega, Vietto e Ighalo.
Árbitro: Anthony Taylor (Inglaterra)