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El gran romance de la NFL se llevó este domingo el premio gordo en Las Vegas. Los Kansas City Chiefs vencieron por 25-22 a los San Francisco 49ers en el tiempo extra y Travis Kelce y Taylor Swift, la pareja del momento en EE.UU., tuvieron el final de cuento de hadas que tanto deseaban.

Fundidos en un largo abrazo y sobre el césped del Allegiant Stadium. Así celebraron la cantante y el jugador el tercer anillo en cinco años para unos Chiefs que se proclamaron campeones del Super Bowl por segundo año consecutivo al vencer en el tiempo extra por 25-22 a los San Francisco 49ers.

Esta épica victoria de los de Patrick Mahomes colocó la guinda a la mediática y muy seguida historia de amor entre Swift y Kelce, quienes han protagonizado incontables titulares en esta temporada de la NFL y han paseado su romance por los estadios de la liga.

No fue, en cualquier caso, una victoria sencilla ni una noche plácida para los seguidores de Kansas City, entre ellos la artista.

El ataque de los Chiefs se atascó en mil y una trampas de la defensa de los 49ers, especialmente en una primera parte que acabó con un 3-10 para San Francisco.

La frustración se adueñó entonces de Kelce y el 'tight end' dejó una de las imágenes de la noche cuando, a gritos y de forma vehemente, se encaró con su entrenador Andy Reid en la primera mitad.

Sus estadísticas al descanso explicaban bien lo que podía pasar por su cabeza: solo le buscaron en una ocasión, solo tuvo una recepción y solo sumó una yarda en los dos primeros cuartos.

La conexión Mahomes-Kelce era clave para el triunfo de los Chiefs y por fin apareció en la reanudación. No fue todo lo constante que hubieran deseado, pero Kelce acabó el partido con 93 yardas y 9 recepciones tras 10 intentos de pase.

Mahomes, por su parte, confirmó su lugar en el olimpo de la NFL con otra actuación memorable: 34 de 46 en pases para 333 yardas con dos pases de anotación, incluido el del tiempo extra para Mecole Hardman que valió un trofeo Vince Lombardi.