Este miércoles ha sido un día de contrastes para la estrella francesa del Real Madrid, Kylian Mbappé, que se debate entre la mala fortuna de una lesión que lo saca del derbi ante el Atlético de Madrid y la autorización de la Dirección Nacional del Control de Gestión (DNCG) para que compre SM Caen, de la segunda división francesa.
Empezando por lo primero, el Real Madrid publicó un parte médico tras la resonancia magnética a la que sometió a Mbappé: “Tras las pruebas realizadas hoy a nuestro jugador Kylian Mbappé por los Servicios Médicos del Real Madrid se le ha diagnosticado una lesión en el bíceps femoral de la pierna izquierda. Pendiente de evolución”.
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El tiempo de baja que se baraja tras las pruebas médicas es de tres semanas, por lo que Mbappé causa baja para su primer derbi ante el Atlético de Madrid y además se perderá el partido de la Liga de Campeones frente al Lille y el del Villarreal de LaLiga.
No podrá acudir a los partidos de la selección francesa en la ventana de octubre de la Liga de Naciones y el objetivo para su regreso sería el día 19, fecha en el que el Real Madrid visita al Celta de Vigo en la jornada previa al clásico del fútbol español, ante el Barcelona, para el que Mbappé ya estaría en perfectas condiciones de jugar.
La buena noticia
Sin embargo, algo que le alegró la jornada fue que según informaron este miércoles medios franceses, la DNCG dio su autorización implícita al abstenerse de intervenir tras el cambio de accionariado, que supone que el 80 % de las acciones del Caen pasaron del fondo estadounidense Oaktree Capital a Coalition Capital.
La transacción había sido anunciada a finales de julio por el propio club, que no aportó entonces detalles sobre el precio pagado. De acuerdo con la prensa, la inversión del fondo de Mbappé ronda los 15-20 millones de euros.
La actual estrella del Real Madrid, de 25 años, se ha convertido así en uno de los pocos futbolistas en activo propietario de un club, como también los es su colega de selección N’Golo Kanté, de uno belga.
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El delantero crecido en Bondy mantiene una larga relación con el Caen, por el que estuvo a punto de fichar en 2012, cuando tenía sólo 13 años. Un año después, el Caen había bajado a segunda división y la familia del jugador optó por el AS Mónaco, en el que estuvo hasta que en 2017 fue traspasado al Paris-Saint-Germain (PSG).
El Caen, que finalizó la pasada temporada en sexto lugar de la segunda división francesa (Ligue 2), es un club que tradicionalmente ha apostado por la cantera y el desarrollo de jugadores jóvenes.