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El Barcelona, imparable en este 2025, sueña con las semifinales de la Liga de Campeones, aunque para ello tendrá que deshacerse del Borussia Dortmund, en un duelo entre los dos equipos más goleadores de la actual edición de la máxima competición continental.

El primer asalto se verá este miércoles en Montjuïc (2 p.m.) y el objetivo para el equipo de Hansi Flick es meterse en la penúltima ronda europea, donde no se ve desde la temporada 2018-19.

Fue ante el Liverpool y de amargo recuerdo. En la ida, los azulgrana derrotaron a los ingleses con claridad (3-0), pero en Anfield encajaron un doloroso 4-0, en el principio del fin de la etapa de Ernesto Valverde en el banquillo azulgrana.

Después de años alejado de la élite europea, el cuadro catalán vuelve a soñar con levantar la sexta ‘Orejona’ de su historia tras un inicio de año espléndido, pues lidera LaLiga con cuatro puntos de margen sobre el Real Madrid, su rival en la final de la Copa del Rey, y sigue invicto en 2025 tras 22 partidos (18 victorias y 4 empates).

Flick ha cambiado la mentalidad de un grupo que, lejos de titubear, ofrece su mejor versión en los grandes escenarios como la Liga de Campeones. Terminó segundo en la fase liga, sometió al Benfica en octavos (4-1) y es el conjunto más goleador de la competición (32), seguido por su próximo rival, el Borussia Dortmund (28).

El cuadro alemán no ha ganado en ninguno de los cinco precedentes contra el Barcelona, dos empates y tres victorias de los azulgranas, que ya vencieron el pasado 11 de diciembre en el Signal Iduna Park en un duelo que decantó un doblete de Ferran Torres y un gol de Raphael Dias ‘Raphinha’ (2-3), que aspira a batir el récord de Leo Messi como el jugador del Barça con más goles en una misma edición (14).

El atacante brasileño es el máximo goleador del torneo con once tantos en diez encuentros, seguido por el ariete del Dortmund Serhou Guirassy, que marcó al Barcelona dos de las diez dianas que lleva en la Champions hasta el momento.

El ‘9′ del Barcelona y ex del Borussia Robert Lewandowski es el cuarto en la lista con nueve en diez duelos. Precisamente al polaco se le da muy bien el equipo de Dortmund, ya que ha anotado 27 goles en los 27 partidos que ha jugado contra ellos.

Será la cuarta vez que el Barcelona se enfrente a un equipo alemán en los cuartos de final de la Champions, después de superar en 2008 al Schalke por 2-0 en el global de la eliminatoria y de eliminar en 2009 al Bayern Múnich (5-1), que se desquitó en 2020 en un partido de fatídico recuerdo para los azulgranas, el 2-8 en Lisboa.

El técnico del Bayern aquella noche era Hansi Flick, que conquistó el ‘sextete’ en el cuadro bávaro tras relevar en el cargo al actual técnico del Borussia Dortmund, Niko Kovac, para quien había ejercido de asistente hasta su destitución.

El preparador de Heidelberg contará con partido más con las bajas ya conocidas del portero Marc-André ter Stegen, del atacante Dani Olmo, y de los centrocampistas Marc Bernal y Marc Casadó.

Wojciech Szczesny, invicto en los 20 partidos que ha jugado con el Barça, es indiscutible bajo palos, como también lo son en el centro del campo Pedro González ‘Pedri’ y Frenkie de Jong, en los laterales Alejandro Balde y Jules Kounde, y en el eje de la zaga Pau Cubarsí e Iñigo Martínez, al que se espera de nuevo en el once titular tras ausentarse ante el Betis por una pequeña lesión fibrilar.

En ataque, Lamine Yamal ha sido el único inamovible en los cuatro partidos disputados tras el último parón internacional. Con todo, Lewandowski y Raphinha apuntan a la titularidad por su jerarquía y rendimiento a lo largo del curso, mientras que Ferran Torres, Pablo Páez Gavira ‘Gavi’ y Fermín López se disputarán el hueco restante.

El Dortmund llega al duelo con confianza, después de haber remontado posiciones en la Bundesliga y alcanzar los cuartos en Europa, pero también justo después de que se conociera la lesión de menisco de Nico Schloterbeck, un hombre clave en la parte defensiva en el equipo de Nico Kovac.

También faltan otros dos jugadores habitualmente titulares que son Pascal Gross, por acumulación de amarillas, y Marcel Sabitzer, por una lesión de rodilla.

Para formar una línea de tres en defensa Kovac tendría que recurrir a Niklas Süle que tiene un golpe en la costilla y además no está en plena forma. Una línea de cuatro, con Julian Ryerson y Bensebaini o Svenson como laterales, sería una alternativa.

La baja de Schlotterbeck también tiene consecuencias en la parte de ataque pues es un jugador clave para armar el juego desde atrás y para organizar la salida, tarea que probablemente recaerá en los hombros del capitán Emre Can.

Adelante, en cambio, Kovac tiene muchas variantes posibles. Guirassy, en punta, es fijo y tal vez Marcel Beier, con un buen rendimiento en los últimos partidos, tengan sus posiciones aseguradas.

La velocidad de Karim Adeyemi puede ser un arma si el Barcelona da espacios para el contragolpe.