La economía de Estados Unidos ha dejado atrás las caídas que la colocaron en recesión técnica y volvió a crecer en el tercer trimestre, un 0,6%, según los datos de la Oficina de Análisis Económico (BEA).
El aumento del PIB fue posible por una mejora de las exportaciones y del gasto de los consumidores, así como de la inversión no residencial y del gasto público.
La economía de Estados Unidos ha dejado atrás las caídas que la colocaron en recesión técnica y volvió a crecer en el tercer trimestre, un 0,6%, según los datos de la Oficina de Análisis Económico (BEA).