Al cierre del primer semestre de 2024 el déficit del Gobierno se ubicó en -3,3 % del Producto Interno Bruto (PIB), siendo esto el peor registro de los últimos 20 años. Así lo dio a conocer un informe del equipo de Investigaciones Económicas del Banco de Bogotá.
De acuerdo con dicho análisis, el desbalance fue el resultado del aumento del gasto público (21,3%), y la caída en los ingresos (-3,9 %). Esto dejó un balance primario de -0,9 % del PIB, siendo el límite exigido por la regla fiscal, lo que refleja el delicado momento que vive la economía colombiana.
“Por lo tanto, el margen de maniobra es bajo y el cumplimiento de la regla fiscal en 2024 dependerá, principalmente, del ajuste en el gasto público (o subejecución del PGN) ya que, por el lado del recaudo de impuestos, las señales no son positivas. En particular, el recaudo de impuestos volvió a ubicarse por debajo de la meta del Gobierno en agosto y el descalce en los primeros ocho meses ronda los $6 billones”, señaló el Banco de Bogotá.
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En ese sentido, el equipo de investigaciones resaltó que, si bien hoy en día los reflectores están puestos en el Presupuesto General de la Nación (PGN) de 2025, las cifras fiscales de 2024 aún no están del todo acordes al cumplimiento de la regla fiscal.
Añaden que desde inicio de año, el equipo alertó que los ingresos del Gobierno relacionados con el recaudo de impuestos se estaban ubicando por debajo de los objetivos, colocando en riesgo el cumplimiento de la regla fiscal. De hecho, aseguraron que gracias a la alta adjudicación del PGN para 2024, los problemas de caja empezaron a hacerse palpables en mayo, y la percepción de riesgo en el país aumentó, a tal punto que los operadores de mercado empezaron a descontar una reducción de la calificación soberana.
“Así, para aquel momento, la actualización del Marco Fiscal de Mediano (MFMP) era la clave para calmar los temores relacionados con la sostenibilidad de las finanzas públicas”, señaló el informe.
Indican que a mitad de junio, los riesgos para 2024 empezaron a moderarse cuando el Gobierno anunció un congelamiento del PGN por $20 billones para hacer frente a la caída en ingresos y poder honrar la regla fiscal. Momento después, señalaron que el Marco Fiscal había revelado que el Gobierno realizaría un ajuste total en su gasto de $50.8 billones frente a lo programado en el PGN de 2024 para garantizar el cumplimiento de la regla fiscal.
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“Desde los ingresos, las sorpresas negativas volvieron a darse en agosto y anticipa que, con alta probabilidad, la meta de ingresos tributarios (ajustada a la baja en junio) tampoco se cumplirá. En agosto, un mes donde había optimismo en el recaudo de renta de personas naturales, dada la entrada en vigor de la reforma tributaria para este segmento, el descalce fue de $1.1 billones, mostrando que el efecto positivo en recaudo de la Ley 2277 de 2022 tampoco cumpliría con las expectativas. Con esto, en los primeros ocho meses, mientras el Gobierno esperaba un recaudo de $184.6 billones, el observado fue de $178.6 billones, un hueco acumulado de $6 billones”, dijo el estudio.
Teniendo en cuenta que el recaudo de impuestos tiene un alto componente estacional, cálculos del equipo de Investigaciones Económicas del Banco de Bogotá sugieren que la probabilidad que los ingresos tributarios se ubiquen por debajo de la meta de los $279.4 billones es de 96 %.
“El cálculo es obtenido al comparar la dinámica del recaudo a agosto de 2024 con los años precedentes. Acá, se encuentra que solo si el recaudo tiene un comportamiento similar al observado en 2021 (un año atípico), la brecha de $6 billones podría cerrase”.
Añaden dentro de esta línea que, de lo contrario, si se comporta como el resto de años desde 2000, la meta se incumpliría.
“Si el comportamiento en lo que queda el año es acorde a la historia reciente, el faltante sería de alrededor de $10 billones. Es decir, si el recaudo de renta de personas naturales e IVA en lo que resta del año no supera los estándares históricos, el ingreso tributario totalizaría $269 billones cuando la meta es de $279 billones”, precisó Banco de Bogotá.
