La Junta Directiva del Banco de la República decidió por mayoría reducir en 50 puntos básicos la tasa de interés de política monetaria al 10,25 %.
En la reunión del Emisor, cuatro directores votaron a favor de esta decisión y tres lo hicieron por una reducción de 75 puntos básicos.
De acuerdo con Leonardo Villar, gerente del Banco de la República, durante la discusión de política, la Junta Directiva tuvo en cuenta diferentes elementos, una tiene que ver con la inflación anual en agosto, dado que esta se situó en 6,1 %, por debajo de lo esperado por el mercado.
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“Las sorpresas a la baja se dieron en las canastas de alimentos por el buen comportamiento de la oferta y en la de regulados por menores ajustes en algunos servicios públicos. La inflación básica sin alimentos ni regulados descendió a 5,5 %”, detalló Leonardo Villar.
Además, recalcó que las medidas de expectativas de inflación para 2025 que se derivan de los mercados de deuda pública se redujeron, mientras que las de los analistas permanecieron relativamente estables.
A su vez, manifestó que el producto interno bruto (PIB) registró un crecimiento anual del 1,8 % en el segundo trimestre en su serie desestacionalizada, impulsado por una demanda interna que creció más de lo proyectado, debido principalmente al dinamismo del consumo privado.
“Si bien la formación bruta de capital fijo aumentó, se mantiene en niveles inferiores a los de prepandemia. Los indicadores de actividad económica para el tercer trimestre sugieren que la economía habría seguido profundizando su proceso de recuperación”, sostuvo Villar.
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Añadió que a pesar de la reducción de la tasa de interés en 50 puntos básicos, y de las expectativas de recortes adicionales por parte de la Reserva Federal de los Estados Unidos, las primas de riesgo en América Latina aumentaron y en Colombia lo hicieron en mayor proporción. “Ello está vinculado, entre otros factores, a la reducción en los precios del petróleo y a la retadora situación fiscal”.
Concluyó: “La decisión adoptada en la sesión de hoy continúa apoyando la recuperación del crecimiento económico y mantiene la prudencia requerida dados los riesgos que subsisten sobre el comportamiento de la inflación”.
Por su parte, el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, manifestó su descontento por la decisión tomada por la Junta Directiva, ya que la reducción de la tasa, para el ministro, no fue la ideal para seguir reactivando la economía de Colombia.
“Era el momento oportuno para cambiar de 50 a 75 puntos básicos. No fue posible”, dijo Bonilla.