En diálogo con EL HERALDO, la presidenta del Cerrejón, Claudia Bejarano, sostuvo que las decisiones que ha tomado el Gobierno nacional en materia de tributación y diversas suspensiones de mercados al sector minero, los ha afectado en gran manera, dado que justamente este segmento es históricamente uno de los que más le ha aportado al crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) del país.
La dirigente de una de las empresas más importantes del país, expresó que han sido años retadores en el que la minería se la ha jugado toda para crecer en todo sentido, especialmente en producción, ventas y generación de empleo.
¿Cómo ha sido el balance hasta al momento de 2024 para el Cerrejón en términos de ventas, producción y operaciones?
Este año ha sido muy complejo, ya que los precios en el mercado han bajado a nivel mundial, es por eso que nos ha tocado ser más competitivos. Ahora mismo estamos exportando mucho carbón al continente asiático, pero el costo de los fletes son un poco más del doble si lo comparamos con los fletes cuando mandamos el carbón a Europa y el Mediterráneo, pero dado a que en Europa ha bajado la demanda, nos ha tocado explorar otros mercados.
Esto hace que nosotros tengamos que ser más competitivos por ejemplo con las minas que hay en Australia y Sudáfrica.
¿Qué es lo que más ha llenado de inquietud al sector minero actualmente?
Las cargas impositivas es una de las cosas que nos ha llenado de mucha preocupación, ya que todas esas cargas de más, en conjunto con una inestabilidad jurídica que tenemos, y especialmente en el sector del carbón, pone en riesgo nuestra competitividad, entonces lo que necesitamos es ser competitivos para poder seguir operando.
Toda esta incertidumbre jurídica afecta, entonces lo que tenemos que hacer es seguir abiertos al diálogo.
Evidentemente la suspensión de exportaciones de carbón a Israel decretada por el Gobierno nacional nos afectó fuertemente, y por tal motivo tenemos que buscar otro tipo de mercados, pero lo preocupante no es eso, sino la mala imagen o la mala recomendación que tendría Colombia ante el mundo y ante la posibilidad de generar mayor inversión extranjera, puesto que Israel no pierde nada, simplemente se consigue otro cliente y listo. Aquí el gran perdedor es Colombia, indudablemente.
¿Cuál fue el balance que tuvo Cerrejón en regalías e inversión social en 2023?
El año pasado, entre impuestos de renta, regalías y otras contribuciones, pagamos $10,6 billones. Solamente las regalías estuvieron alrededor de $2,1 billones. Y si nos vamos con lo que tiene que ver con la inversión social invertimos $105 mil millones el año pasado, mientras que la inversión ambiental fue de $395.000 millones.
Octubre, noviembre y diciembre. ¿Cuáles son las metas que tiene el Cerrejón para lo que queda de este año?
Esperamos lograr la meta de producción que está en un promedio de 22 millones de toneladas, por eso es clave que ocurran muchas cosas que nos están afectando, ¿por qué? Porque cada vez que perdemos producción, ya sea por los bloqueos o porque nos llovió más de la cuenta, ya no podríamos recuperar, sin embargo, todo el equipo está comprometido en cumplir las metas. Estos tres meses son más que claves para ello.
¿Cuántos empleos generan en el Cerrejón entre directos e indirectos?
Tenemos unos 13.700 empleados actualmente, y yo diría que la mitad son directos y la otra mitad son indirectos.
Me llamó mucho la atención que mujer está teniendo una participación importante en el sector minero, ya que, de los 13.700 empleados que hay en el Cerrejón, 1.500 son mujeres. ¿Cómo ha visto la participación de la mujer en ese sentido?
Es muy importante que la mujer tenga una participación en el sector minero. Yo creo que el reto para nosotras las mujeres es seguirnos fortaleciendo, tanto en materia de preparación académica como de actitud y fortaleza mental.
Tenemos un ingrediente adicional como mujeres y es el alto nivel de intuición que tenemos. Nosotros somos igual de capaces que los hombres, y yo creo que al final es un balance. Nuestro objetivo es aumentar el porcentaje de mujeres, que no sean solamente 1.500 mujeres trabajando acá, sino muchas más.