Tras no alcanzarse un acuerdo entre las distintas partes que participaron en las mesas de negociación, el presidente Gustavo Petro, vía decreto, fijó el pasado martes el alza del salario mínimo en un 9,54 %, quedando en $1.423.500.
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El salario de 2024 era de $1.300.000, por lo que en 2025 sube $123.500. Y el subsidio de transporte, a su vez, se incrementa en $38 mil, un 23 %, pasando de $162.000 en 2024 a $200.000 el año entrante. Con lo que la suma total de salario y subsidio queda en $1.623.500.
El anuncio fue hecho por el mandatario durante el evento Novena por la Vida en el municipio de Zipaquirá, Cundinamarca, donde vivió y estudió en su juventud: “El salario mínimo sí hace crecer la economía, no al contrario, no es con trabajadores esclavos como la economía de un país crece”.
Agregó en este sentido el jefe de Estado que “la inflación el año entrante esperamos que se coloque en 3%, lo que significa que (el salario mínimo) va a tener un ascenso de 6,54 % real”.
El sindicato de trabajadores de la CUT mantuvo la propuesta de aumentar el salario en un 12% y la Asociación Colombiana de las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas, Acopi, planteó un aumento del 6,83 %.
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Este salario, que recibirían unos 2,2 millones de trabajadores –el 10 % de las personas ocupadas laboralmente en el país–, según el diario La República, es el sexto más bajo en América Latina y el segundo más bajo de la OCDE.
Lo que también sube
Con el alza del salario mínimo, también se vienen una serie de incrementos de bienes y servicios como las reparaciones, mantenimiento de algunos vehículos y temas de medicina.
Así mismo, el copago de las EPS, los pasajes de transporte público y algunas multas de tránsito.
De igual modo, la pensión mínima y aportes voluntarios, las tarifas judiciales y legales, las tasas notariales, los derechos de petición económica y los subsidios del Estado.
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También los servicios de los trabajadores independientes, como terapeutas, mecánicos y otros.
Al respecto, la ministra del Trabajo, Gloria Inés Ramírez, afirmó que en el Gobierno están “revisando para que algunos bienes, servicios y artículos se desindexen, que para nosotros es fundamental. Hay preocupación en casos como vivienda y lo que está pasando con los microcréditos que han tenido una caída”.
Y concluyó que serán aproximadamente 200 bienes y servicios desindexados: “Ya ratificamos los 188 productos, y le hemos solicitado a Hacienda y a todos los ministerios para que nos digan qué otros productos y bienes pueden ser desindexados”.
Las reacciones que deja
Entre las reacciones que produjo la subida del salario, Bruce Mac Master, presidente de la Andi, aseveró que “las decisiones populistas terminan siendo fiesta de pocos días y hambre hacia el futuro”.
A su vez, Luis Fernando Mejía, director de Fedesarrollo, observó que “tendrá dos efectos primordiales: uno, al encarecer sustancialmente el costo del empleo formal, inducirá aún más la contratación informal, especialmente en las microempresas; y dos, presionará al alza la inflación, retrasando la reducción de tasas de interés por parte del Emisor”.
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Por su parte, el representante Heráclito Landínez, del Pacto Histórico, aseguró que “se recuperará el poder adquisitivo de los asalariados, pues la inflación será cercana al 5 % anual”.
La representante petrista María Fernanda Carrascal saludó que “reconoce el valor del esfuerzo diario de millones de personas que sostienen la economía con su trabajo. Este ajuste no solo significa un alivio en el costo de vida, sino también un mensaje claro de que la dignidad laboral merece ser protegida y fortalecida”.
Y María Claudia Lacouture, presidenta de AmCham Colombia, explicó que “este incremento afecta especialmente a las mipymes al elevar los costos laborales por encima de la productividad. Es esencial que se complemente con políticas públicas responsables y coherentes que promuevan el empleo formal y aseguren la sostenibilidad empresarial”.
