Juan Camilo Nariño, presidente de la Asociación Colombiana de Minería (ACM), expresó que la reciente declaratoria del estado de Conmoción Interior por parte del Gobierno Nacional, en reacción a la crisis de seguridad en el Catatumbo, genera dudas y preocupaciones en el sector minero-energético.
Afirman que en una situación como esta, se esperaría un manejo responsable de los recursos y una estrategia clara para garantizar la seguridad y la estabilidad en la región. “¿Por qué, entonces, no se administraron los riegos advertidos y no se puso en marcha toda la capacidad del Estado para atenderlos con la anticipación debida?”.
Así mismo, expresó que es preocupante que se utilice una figura excepcional como la Conmoción Interior, cuya procedencia en este caso no es clara, para decretar impuestos a un sector que ya ha venido siendo afectado.
Lea también: (En 2024 cayó la creación de empresas en Colombia frente al 2023, indicó Confecámaras)
“La Constitución y la Ley Estatutaria que regulan los estados de excepción señalan que la Conmoción Interior sólo es admisible ante situaciones extraordinarias, imprevistas e inesperadas. Es por esto que las medidas que se emitan en desarrollo de los estados de excepción, deben tener una relación directa con los hechos que originaron la declaratoria”, afirmó.
Añadió Nariño: “Esta figura constitucional no puede convertirse en una herramienta para corregir la falta de previsión, las deficiencias en la gestión y administración del Estado, ni en un “fast track” para revivir iniciativas legislativas y tributarias que no avanzaron en el Congreso”.
Desde la ACM hacen un llamado al Gobierno a replantear estas decisiones y a diseñar estrategias de seguridad y financiamiento público que sean estructurales, equitativas y sostenibles en el tiempo. “El país necesita soluciones que realmente atiendan la crisis humanitaria y mejoren las condiciones de vida de las familias afectadas”.