La infanta Cristina, hija del rey de España, decidió renunciar al derecho de recurso y comparecerá voluntariamente ante el juez que la llamó a declarar como imputada por presuntos delitos de fraude fiscal y blanqueo de capitales, anunciaron este sábado sus abogados defensores.
El gabinete de abogados Roca Junyent, que lleva su defensa, informa que así lo han comunicado hoy al juzgado de Palma de Palma de Mallorca (Islas Baleares, Mediterráneo), donde se investiga el caso.
Los abogados subrayan en un comunicado que la infanta no presentará recurso para evitar una dilación del procedimiento judicial y evitar la 'incómoda e injusta' situación que está viviendo.
Recalcan también que la hija menor del rey Juan Carlos 'no tiene nada que ocultar' ni al juez instructor 'ni al conjunto de la sociedad española', porque no ha participado 'en ninguna actividad ni en ninguna actuación que pueda ser calificada contraria a Derecho y así quiere aclararlo cuanto antes' ante el juez.
Los letrados expresan su 'absoluta y firme discrepancia con los argumentos fácticos y jurídico-penales sobre cuya base se ha decidido la citación de S.A.R. para declarar en calidad de imputada, situación que en modo alguno debería derivarse de las diligencias instruidas hasta la fecha'.
Por su parte, la Casa del Rey, organismo que depende directamente del monarca y tiene como misión apoyarle en sus actividades como jefe del Estado, valoró hoy 'muy positivamente' la decisión de la infanta Cristina de no recurrir.
El pasado martes, el juez José Castro, que investiga el denominado 'caso Nóos', comunicó la imputación de la hija menor del rey Juan Carlos I y la citó a declarar el próximo 8 de marzo, en el proceso sobre las presuntas actividades corruptas del Instituto Nóos, que presidió el marido de Cristina de Borbón.
El juez Castro sostiene en su auto que hay indicios suficientes de que la infanta Cristina se prestó a que Aizoon, la sociedad que compartía al 50 % con Iñaki Urdangarin, 'sirviera de andamiaje imprescindible para la comisión de delitos fiscales' y gastó fondos de la empresa conociendo su origen ilícito.
Castro, que ya imputó a la infanta el año pasado, aunque un mes después le retiró esta condición, defiende que tiene la obligación de imputarla para que dé cuenta de su conocimiento de los presuntos delitos fiscales cometidos por Aizoon.
Esta sociedad habría servido para encauzar el reparto de beneficios de las actividades ilícitas del Instituto Nóos, que obtuvo fondos públicos de forma irregular cuando lo presidía Urdangarin.
Ayer, uno de sus abogados afirmó que la infanta Cristina está enamorada de su esposo, Iñaki Urdangarin, en el que 'confía, ha confiado y seguirá confiando contra viento y marea'.