La flota internacional que intenta localizar el avión perdido de Malaysia Airlines emprendió el viernes la búsqueda submarina de las cajas negras en una franja remota del océano Índico, a unos días de que los dispositivos dejen de emitir señales para su ubicación al azotárseles las baterías.
El barco de la Armada australiana Ocean Shield, que arrastra un localizador de señales de la Armada estadounidense, y el barco de la armada británica HMS Echo, que tiene aparatos de búsqueda submarina, convergirán a lo largo de una franja desolada de 240 kilómetros en el Indico, dijo Angus Houston, jefe de la agencia coordinadora conjunta de búsqueda.
Las grabadoras de datos del avión perdido emiten señales que pueden ser detectadas por los equipos especiales a bordo de los barcos.
Debido a que el localizador de cajas negras puede ubicar señales a una profundidad de 6.100 metros es posible que pueda encontrar los dispositivos aun cuando esté en la parte más honda de la zona de búsqueda, que está a 5.800 metros de profundidad bajo la superficie.
La localización de restos flotantes del aparato es crucial para angostar la zona de búsqueda, porque las autoridades pueden recurrir a información sobre las corrientes oceánicas para seguir la pista hasta el lugar donde el avión quizá cayó en el mar, y dónde podrían ubicarse las grabadoras que contienen información de vuelo.