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 El papa Francisco pidió hoy que se respete el alto el fuego entre el Ejército ucraniano y los separatistas prorrusos en Ucrania, una tregua que, sin embargo, no ha impedido que la violencia continúe en algunas zonas del este del país.

Durante una audiencia mantenida con los obispos de Ucrania en la Sala Clementina del Palacio Apostólico del Vaticano, Jorge Bergoglio pidió que 'el Señor conceda pronto la paz' al país e hizo un llamamiento 'a todas las partes interesadas para que se apliquen los intereses alcanzados de mutuo acuerdo'.

'Que sea respetado el principio de derecho internacional; en particular, que sea observada la tregua recientemente firmada y que se apliquen todos los esfuerzos que son condiciones para evitar la reanudación de las hostilidades', agregó.

El obispo de Roma afirmó que la exrepública soviética es una 'tierra que durante mucho tiempo ha estado sometida al martirio' y lamentó que esta crisis haya tenido 'graves repercusiones en la vida de las familias'.

'Como país, se encuentran en una situación de grave conflicto que se está alargando durante varios meses, que sigue cobrándose muchas vidas inocentes y que causa gran sufrimiento a toda la población', señaló.

Bergoglio finalizó su discurso alentando a los obispos ucranianos a mostrar 'cercanía con los sacerdotes y con los fieles' para aportarles comprensión y esperanza.

'Escuchando a vuestro pueblo, les recordáis los valores que lo caracterizan: el encuentro, la colaboración, la capacitad de resolver las controversias. En pocas palabras: la búsqueda de la paz posible', concluyó.

Por vez primera desde el estallido del conflicto en el este de Ucrania, ambos bandos declararon el pasado domingo el inicio del alto el fuego, una tregua que sin embargo no se está cumpliendo en algunas zonas como en la ciudad de Debáltsevo, que ha sido atacada por milicias separatistas prorrusas.

El Gobierno ucraniano acusó el pasado 17 de febrero a Rusia de incumplir los acuerdos de paz, incluido el alto el fuego, al lanzar una ofensiva contra esa localidad de la región oriental ucraniana de Donetsk.

Como excusa para justificar su ofensiva, los insurgentes adujeron que Debáltsevo, cruce de caminos entre los principales bastiones prorrusos de Donetsk y Lugansk, es parte de su territorio y que la declaración de alto el fuego no le afecta.