Al menos 38 personas han muerto en las últimas veinticuatro horas en combates y por el lanzamiento de más de un millar de cohetes contra los pueblos de Fua y Kafraya, de mayoría chií y en la provincia septentrional siria de Idleb, informaron hoy activistas.
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos precisó que facciones islámicas han lanzado unos 1.400 cohetes y proyectiles de mortero contra esas dos localidades.
Los fallecidos son ocho civiles, entre ellos un menor, que perdieron la vida por el impacto de los proyectiles; así como doce seguidores del régimen sirio y dieciocho combatientes opositores.
Además, hay al menos cuarenta personas heridas, algunas de gravedad, con lo que el Observatorio no descartó que el número de víctimas mortales aumente.
La periferia de Fua y Kafraya es escenario de violentos enfrentamientos entre los efectivos del régimen de Bachar al Asad, apoyados por milicianos del grupo chií libanés Hizbula, y el Frente al Nusra, filial siria de Al Qaeda, y otras facciones aliadas.
Casi toda la provincia de Idleb está en manos de la rama de Al Qeda y otros grupos armados que en los últimos meses han arrebatado a las autoridades amplias áreas de esta región.
Por otro lado, en la ciudad de Alepo, al menos once personas perecieron hoy, entre ellas siete menores, por el impacto de varios cohetes disparados por brigadas rebeldes islámicas contra los barrios de Al Midan, Yamiat al Zahra y Bab al Farch, todos ellos en manos del régimen.
La agencia de noticias oficial siria, Sana, confirmó solo la caída de proyectiles en Al Midan, donde, según sus datos, al menos seis civiles murieron y otros catorce resultaron heridos.
Siria es escenario de un conflicto desde hace más de cuatro años que ha causado más de 240.000 fallecidos, según el Observatorio.