La oposición de Haití salió a las calles de Puerto Príncipe para protestar contra las pasadas elecciones presidenciales, que consideran fraudulentas, en una jornada en la que se quemaron neumáticos y hubo agresiones con piedras.
A su vez, un coche fue quemado, los cristales de algunos vehículos rotos y se lanzaron botellas, según revelaron testigos presenciales a varios medios de comunicación locales.
El transcurso de la protesta estuvo estrechamente vigilado por la Policía, que hizo uso de gases lacrimógenos y contó con el respaldo de fuerzas de la Misión de las Naciones Unidas para la Estabilización en Haití (Minustah).
La tensión fue palpable en la manifestación, a la que acudieron cientos de personas, cuando la marcha llegó a las cercanías de la sede del Consejo Electoral Provisional (CEP) en el barrio de Petionville.
Sin embargo, no hubo incidentes frente al edificio y la protesta continuó, incluso a ritmo de música.
El CEP, a la que la oposición también pide un recuento, ha estado todo el día fuertemente custodiado y vigilado por la Policía, que ha colocado vallas protectoras en sus inmediaciones.
La salida a la calle de la oposición coincide con la publicación por parte de la ONG brasileña Instituto Igarapé, reseñada hoy por varios medios, de una encuesta a pie de urna realizada en la primera ronda de las elecciones presidenciales haitianas del pasado 25 de octubre.
Los resultados provisionales oficiales ofrecidos por la CEP arrojaron que un 32,8 % votó por el candidato oficialista del Partido Haitiano Tet Kale (PHTK), Jovenel Moise, seguido por el opositor Jude Celestin, con un 25,3 %.
Según el sondeo de Igarapé, realizado a 1.800 electores en 135 centros de voto a lo largo del país, el más votado fue Celestin con un 37,5 %; seguido de Jean Charles Moise -que oficialmente quedó tercero-, con un 30,6 % y con un 19,4 %, Marysse Narcisse, de Familia Lavalas, del expresidente Jean Bertrand Aristide.
Narcisse quedó cuarta según los resultados provisionales ofrecidos por la CEP.
En declaraciones realizadas hoy en el departamento de Artibonite (norte), Jovenel Moise aseguró que ha sido el candidato más votado por los haitianos y que por ello no debe renunciar, mientras que Narcisse afirmó que Familia Lavalas sigue 'determinada en su lucha' contra los resultados.
El Gobierno haitiano pidió ayer calma y condenó la escalada de violencia en las manifestaciones que se registran desde hace varias semanas en el país en contra de los resultados electorales.
A través de un comunicado, el Ejecutivo pidió a la población que mantenga la calma y solicitó a la oposición que sea 'responsable'.