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París. Un vídeo grabado por el circuito interno de cámaras del metro de París muestra al cerebro de los atentados del 13-N, Abdelhamid Abaaoud, en una estación junto a un cómplice media hora después de los ataques en las terrazas de distintos cafés.

Las imágenes -cuya existencia se conocía pero no habían sido difundidas hasta ahora- fueron reveladas por el canal privado de televisión M6 y enseñan a Abaaoud aparentemente tranquilo, entrando sin pagar al metro junto a otro hombre en la estación de metro Croix de Chavaux, en el suburbio parisino de Montreuil.

Este segundo individuo, cuya cara aparece pixelada, podría ser, según la cadena, la persona que se hizo explotar el 18 de noviembre en un piso de Saint Denis, durante el asalto de las fuerzas de elite de la policía en el que murieron tres personas: Abaaoud, su prima Hasna Aitboulahcen y un tercer hombre aún no identificado.

En el vídeo, el considerado como cabecilla de los tres comandos que perpetraron los atentados del 13-N, en los que murieron 130 personas, aparece sonriente, vestido con ropa deportiva oscura y unas llamativas zapatillas de color naranja.

Las imágenes fueron tomadas a las 22.14 hora local (21.14 GMT), es decir, más o menos media hora después de que el llamado 'comando de las terrazas' dejara más de una treintena de muertos en varios cafés y restaurantes de los distritos X y XI de París.

La estación de metro está a unos 250 metros del lugar donde apareció con varios kalashnikov el Seat León negro utilizado por el comando yihadista. Los investigadores creen que desde ahí Abaaoud tomó el metro para acercarse a la sala Bataclan, donde todavía se desarrollaba la toma de rehenes.

El automóvil había sido arrendado en Bélgica por Brahim Abdeslam, uno de los terroristas que formó parte de ese comando y que se hizo saltar por los aires con un chaleco de explosivos en una terraza de un bar.

Precisamente, la televisión muestra otra imagen exclusiva en la que Brahim Abdeslam -cuyo hermano Salah, también autor de los ataques continúa huido- está en el café Comptoir Voltaire segundos antes de accionar su cinturón de explosivos con el que se suicidó e hirió de gravedad a una camarera.

El mismo reportaje difunde imágenes estáticas de los hermanos Abdeslam y de Mohamed Abrini, otro de los cómplices huidos, cuando compraba en una gasolinera de camino hacia París la noche anterior a los atentados. Ambos viajaban desde Bélgica.