Las principales administradoras de fondos de pensiones de Latinoamérica pidieron este miércoles en Ciudad de Panamá aumentar la edad de jubilación, en especial la de las mujeres, para preservar los sistemas de pensiones.
'No podemos seguir con las mismas edades de jubilación y con las mismas tasas de cotización de hace 30 años. El sistema chileno, por ejemplo, tiene 35 años de vigencia', reconoció el presidente de la Federación Internacional de Administradoras de Fondos de Pensiones (FIAP), Guillermo Arthur, durante una reunión de la asociación celebrada en Panamá.
Las pensiones en América Latina, explicó Arthur, están 'amenazadas' por dos variables fundamentales: el aumento de la esperanza de vida y la bajada de los tipos de interés.
'Si yo hoy día voy a vivir un 30 % más que cuando nació el sistema de pensiones, ¿cómo voy a financiarme con el mismo dinero? Una mujer que llega a los 60 años en Chile vive, en promedio, 29 años más', afirmó el presidente de la FIAP.
Un panorama que, según Arthur, se repite en el resto de países de América Latina y que se agudiza en el caso de las mujeres ya que estas viven generalmente más tiempo y, sin embargo, su edad de jubilación es menor.
Los tipos de interés, por otro lado, han pasado en las últimas décadas del 5,5 % al 0,3 %, 'lo que afecta no solo a la tasa de acumulación sino también a la tasa de desacumulación', apuntó Arthur.
'Cada punto menos en la tasa de interés significa un 20 % menos de pensión', precisó el directivo.
La asociación, que celebra su XIV Seminario Internacional en Panamá hasta el viernes, instó además a 'promover los planes de ahorro provisional voluntario' y los conocidos como 'activos alternativos'.
Estos productos, añadió el directivo, 'tienen menos liquidez que los activos normales pero mayor rentabilidad' y 'contribuyen a la seguridad de los fondos por su comportamiento contracíclico'.
Las administradoras de los 16 países que forman parte de la FIAP gestionan más de 650.000 millones de dólares, el 90 % de los cuales se concentra en México, Perú, Colombia y Chile, según datos de la propia federación.