Los cuatro socios fundadores del Mercosur acordaron que Venezuela no ejercerá la presidencia del bloque y alertaron de su posible suspensión si no adopta las normas internas, incluso en los ámbitos comercial y de derechos humanos, según informó la cancillería brasileña.
La nota divulgada por el Ministerio de Relaciones Exteriores de Brasil, que informa sobre esos acuerdos, incluye por primera vez una seria advertencia al Gobierno de Nicolás Maduro y dice que si no se ha adaptado a las normas del Mercosur para el 1 de diciembre próximo será 'suspendido' del bloque.
Venezuela firmó el Protocolo de Adhesión al bloque en 2006 y, en 2010, tras la suspensión de Paraguay por la destitución del entonces presidente Fernando Lugo, fue aceptada como miembro de pleno derecho con el beneplácito de Argentina, Brasil y Uruguay.
En ese momento, se estableció un plazo de cuatro años para que Venezuela se adaptase a la normativa del bloque, lo que hasta ahora no ha ocurrido y que, según la nota difundida por Brasil, condujo a la decisión que le impide a Caracas asumir la presidencia rotativa.
Según fuentes diplomáticas consultadas por Efe en Brasilia, esa decisión fue respaldada plenamente por Argentina, Brasil y Paraguay, en tanto que Uruguay, que no estaba del todo convencido, se abstuvo y con eso no impidió el consenso necesario para adoptarla.
Entre las normas aún no ratificadas por Venezuela, la nota de la cancillería brasileña cita el Acuerdo de Complementación Económica nº 18, que trata sobre la libre circulación de bienes, así como el Protocolo de Promoción y Protección de Derechos Humanos y el Acuerdo sobre Residencia de Nacionales de los Estados Partes del Mercosur.
La nota firmada por el canciller brasileño, José Serra, dice que el plazo para que Venezuela ratificase la normativa interna venció el pasado 12 de agosto y, en tono taxativo, informa de que se acordó que si no se ha puesto al día para el 1 de diciembre, ese país será 'suspendido' del Mercosur.
Las cancillerías de Argentina y Paraguay informaron también sobre ese asunto en sendos comunicados, aunque no aclaran que, si para esa fecha Venezuela no ha cumplido, será suspendida.
Sí especifican que se le ha otorgado a ese país lo que califican de 'plazo complementario', hasta el 1 de diciembre, para que cumpla con 'las obligaciones asumidas en su Protocolo de Adhesión'.
En relación a la presidencia rotativa del Mercosur, que Venezuela dijo haber asumido en julio pasado, pese a la resistencia de Brasil, Argentina y Paraguay, la nota de la cancillería brasileña dice que se ha decidido que, durante este semestre, será ejercida en conjunto por los cuatro socios fundadores.
Según Brasil, en ese período se 'podrán definir cursos de acción y adoptar decisiones necesarias en materia económica y comercial', incluso sobre 'negociaciones comerciales con terceros países o bloques'.
Eso afecta a las tratativas para un acuerdo con la Unión Europea (UE), el único de envergadura que el bloque discute actualmente y de cuya negociación Venezuela no participa, justamente por su falta de adaptación a la normativa comercial interna.
La presidencia rotativa fue ejercida por Uruguay en el primer semestre y en el segundo le habría correspondido a Venezuela, según el orden alfabético que rige en el Mercosur para esos traspasos.
Sin embargo, Argentina, Brasil y Paraguay se opusieron a que ese cargo recayera en un país cuya democracia ponen en duda y que, aún más, no ha adoptado todavía todas las normas internas del bloque.
Aun así, una vez concluido su período, en junio pasado, Uruguay se negó a continuar ejerciendo la presidencia del Mercosur, que el Gobierno de Caracas decidió asumir pese al rechazo explícito de tres de los miembros del bloque.
Según la nota de la cancillería brasileña, el acuerdo entre los fundadores del Mercosur 'fue adoptado con espíritu de preservación y fortalecimiento del bloque, de modo de asegurar una solución de continuidad al funcionamiento de sus órganos y mecanismos de integración, cooperación y coordinación'.