El presidente electo de EEUU, Donald Trump, adelantó ayer que no va a investigar a Hillary Clinton por el caso de los correos electrónicos.
El cambio de postura lo adelantó una de las colaboradoras más estrechas de Trump, Kellyanne Conway, en una entrevista en el canal MSNBC, en la que dijo que el magnate 'quiere pasar la página'.
Durante su campaña, Trump prometió que si ganaba las elecciones designaría a un fiscal especial para investigar a Clinton, a quien acusó de comprometer la seguridad del país por usar un servidor privado de correo electrónico para tratar asuntos oficiales siendo secretaria de Estado (2009-2013).
El FBI, que ya se ocupó del caso, lo dio por cerrado de forma definitiva, considerando que no había indicios de delito.
Aparentemente, el presidente electo tampoco buscará que la ex primera dama sea juzgada por las donaciones recibidas por la Fundación Clinton, que también fueron blanco de sus ataques en los últimos meses.
Seguidores de Trump
El giro promete enfadar a muchos de los seguidores más fieles de Trump, que durante los mítines acostumbraban a corear consignas pidiendo enviar a Clinton a la cárcel.
Ayer, el digital Breitbart, uno de los más influyentes en la derecha radical, abría con el titular 'Promesa rota' para informar de la decisión.
A priori, Trump encontrará también resistencia entre muchos legisladores de su partido, que han apostado insistentemente en investigar a Clinton, algo que no parece preocupar demasiado a su equipo.
Sondeo
Según una encuesta publicada ayer, la mayoría de los estadounidenses quiere que Trump cierre su cuenta de Twitter.
De acuerdo con el sondeo, hecho por la Universidad de Quinnipiac a 1.071 votantes entre el 17 y el 20 de noviembre, el 59 por ciento es partidario de que el magnate neoyorquino eche el cerrojo a la cuenta de la red social, mientras el 35 por ciento opina lo contrario.
Sin embargo, un 59 por ciento de los consultados se muestra 'optimista' sobre el Gobierno de Trump y un 49 por ciento cree que será un buen o gran presidente, de acuerdo con el sondeo, que tiene un margen de error del tres por ciento.
Ben Carson: candidato
Por otro lado, el magnate neoyorkino anunció ayer que está considerando 'seriamente' la posibilidad de sumar a su gabinete a quien fue uno de sus rivales en las elecciones internas republicanas, el neurocirujano Ben Carson.
'Estoy considerando seriamente al Dr. Ben Carson como titular del HUD' (Departamento de Vivienda y Desarrollo Urbano, dijo Trump en un tuit.
'He llegado a conocerlo bien, y es una persona talentosa que ama a la gente', agregó el presidente electo sobre Carson, quien fue el único aspirante negro a la Casa Blanca y es uno de los vicepresidentes del equipo de transición.
El mensaje de Trump se dio a conocer poco después de que Carson se reuniera con el presidente electo en la Torre Trump, como parte de los encuentros que el magnate neoyorquino viene manteniendo para formar el gabinete que lo acompañará en enero próximo.
Tras salir de esa reunión, Carson evitó hacer declaraciones a los periodistas y salió rápidamente del edificio.
Sin embargo, el pasado fin de semana, en declaraciones a la cadena Fox, el neurocirujano dijo que si le ofrecen un puesto, 'lo considerará seriamente', aunque previamente había afirmado que prefería trabajar 'como un asesor' de la Administración Trump.