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Las autoridades de Costa Rica informaron este jueves que han dado asistencia humanitaria a las comunidades de Conte Burica y Carona de Burica, habitadas por indígenas de la etnia Ngäbe que se encuentran aislada en una remota zona del sur del país ante los efectos del huracán Otto.

'La Comisión Nacional de Emergencias (CNE) hizo entrega el miércoles de 400 paquetes de comida y agua potable a las comunidades del territorio indígena Ngäbe de Conte Burica', indicó un comunicado del Gobierno costarricense.

En este poblado habitan unas 160 familias indígenas que no tienen acceso a telecomunicaciones, caminos, agua potable y electricidad.

Un camión del estatal Instituto Costarricense de Electricidad entregó las provisiones en la comunidad de Alto Conte, desde donde fueron trasladados a caballo a la comunidad indígena y poblados como el Progreso, Alto Buqueri y Alto Carona.

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La CNE explicó que 18 oficiales de la Policía de Fronteras ingresará al pueblo de Carona de Burica, frontera con Panamá, donde hay personas con enfermedades respiratorias no graves y que necesitan alimentos.

'El acceso para llevar más de media tonelada de alimentos será por Puerto Armuelles, Panamá, pues el acceso por territorio costarricense de Punta Burica está bloqueado por derrumbes', informó la CNE.

Las autoridades panameñas ya autorizaron el ingreso de los oficiales costarricenses a Puerto Armuelles y para el viernes está prevista la llegada de la comida al pueblo de Carona, el cual se ubica a una hora y media a pie desde territorio panameño.

Los oficiales valorarán el estado de salud de los indígenas, les brindarán asistencia básica y permanecerán en el lugar el tiempo necesario hasta que puedan ingresar helicópteros.

Desde el fin de semana pasado la zona sur de Costa Rica, fronteriza con Panamá, ha sido azotada por las lluvias generadas por Otto desde antes de convertirse en huracán.

Otto se acerca a la costa caribeña de Costa Rica y Nicaragua como huracán de categoría 2, con vientos de hasta 165 kilómetros por hora, y se prevé que impactará tierra en las próximas horas.

Según el pronóstico, el fenómeno atravesará parte de ambos países, se debilitará y saldrá al océano Pacífico mañana en forma de tormenta tropical.

Costa Rica tiene abiertos hasta el momento 18 albergues, donde hay al menos 1.335 personas.

Desde el martes el Ministerio de Seguridad evacuó obligatoriamente a las 4.000 personas de las comunidades del Caribe norte del país donde impactará de manera directa el huracán.

El presidente de Costa Rica, Luis Guillermo Solís, decretó la noche del miércoles emergencia nacional y está en alerta roja el Caribe, la zona norte (fronteriza con Nicaragua) y el Pacífico central y sur.