En medio de una rueda de prensa ofrecida desde Washington, tras una semana de diálogos con funcionarios del gobierno y congresistas de los Estados Unidos, el vicepresidente de la República, general (r) Óscar Naranjo, admitió que de fracasar el Plan Colombia en materia de erradicación forzosa y sustitución manual de cultivos ilícitos en Colombia, la Casa Blanca pedirá que el país vuelva a la aspersión aérea.
Por ello, explicó Naranjo, Washington le ha dado un compás de espera a Bogotá: 'les hemos dicho es que necesitamos y merecemos una oportunidad para demostrar que el plan que tenemos de erradicación forzosa y sustitución manual comienza a dar resultados'.
No obstante, el exdirector de la Policía y exnegociador de paz en La Habana dijo a los periodistas que la gira fue exitosa, pues no le exigieron a Colombia empezar a fumigar desde el aire los cultivos ilícitos inmediatamente.
Naranjo agregó que trataron con altos funcionarios norteamericanos, como su homólogo vicepresidencial, Mike Pence, el hecho de que en las mediciones de efectividad contra el flagelo del narcotráfico no solo deben estar la cantidad de hectéras cultivadas sino también la cantidad de coca que incautan las autoridades policiales y militares colombianas, afectando de esta manera la cantidad de la droga que llega a territorio estadounidense.
Por ello, pidió a los Estados Unidos empezar a implementar un mecanismo para hacer una medición certera de la cantidad de coca decomisada y la cantidad que logra pasar sus fronteras.
El pasado 8 de noviembre, Luis Carlos Villegas, ministro de Defensa, al reportar la incautación del 'cargamento de cocaína más grande de nuestra historia', cuando cayeron más de 12 toneladas de cocaína pura, informó que la fuerza pública alcanzaba a esa fecha el 88 por ciento de las 50 mil hectáreas erradicadas forzosamente, establecidas en 2017 por el Gobierno Nacional.