Israel se paró ayer durante dos minutos con el sonido de las sirenas antiaéreas para recordar a los seis millones de judíos que fueron asesinados durante el Holocausto, en una jornada especial que el país celebra según el calendario hebreo.
Inmóviles, en silencio, algunos serios, otros con cara compungida o con la mano en el corazón, los israelíes recordaban ayer a las víctimas de este oscuro episodio de la II Guerra Mundial durante los dos minutos que se activaron las alarmas.
El transporte público también se detuvo, así como muchos coches privados e incluso ambulancias que durante ese tiempo echaron el freno, se orillaron en la carretera y sus conductores salieron de los vehículos para participar en este emotivo gesto que marcaron los actos de ayer.
Shmuel Bouvert fue uno de los cientos de viandantes que pararon su paso en una de las calles principales del centro de Jerusalén para mostrar su respeto.
Con 34 años y nacido en la ciudad, parte de su familia proviene de Europa y sobrevivió a la Shoá (Holocausto). 'Imagina que algo malo pasa en tu casa: siempre lo vas a recordar. Pero en especial, este día todos lo rememoramos en los colegios, en todas partes', contó el joven.
Justo al terminar el simbólico acto de silencio el presidente israelí, Reuvén Rivlin, y el primer ministro, Benjamin Netanyahu, depositaron una ofrenda floral en el Museo del Holocausto (Yad Vashem), donde se sucedieron los actos institucionales de recuerdo que comenzaron en ese mismo lugar anoche.
Este evento, uno de los más solemnes del calendario hebreo en Israel, comenzó la víspera con la tradicional ceremonia en la que seis supervivientes encienden seis antorchas por los seis millones de muertos, y en la que tanto Rivlin como Netanyahu advirtieron de los peligros del antisemitismo en el mundo.
El resto del mundo rinde homenaje a la Memoria de la Víctimas del Holocausto el 27 de enero, el día en que en 1945 las tropas soviéticas liberaron Auschwitz.