El primer ministro británico, Boris Johnson, afirmó este jueves que procederá con 'máxima precaución' a la hora de relajar las medidas de confinamiento obligatorio de la población para evitar una segunda oleada de contagios por COVID-19.
Este fue el mensaje que Johnson trasladó este jueves a los miembros de su gabinete, según informó un portavoz del despacho oficial de Downing Street.
'El primer ministro dijo, al considerar si podría haber una relajación de las directrices existentes, que no vamos a hacer nada que nos arriesgue a (sufrir) un segundo pico', afirmó esta fuente.
El objetivo del 'premier' es guiarse 'por la ciencia y los datos' y 'seguir de cerca el impacto de suavizar las medidas de distanciamiento social', al tiempo que no descarta volver a endurecerlas 'si fuera necesario' ante un nuevo brote de la enfermedad.
El Gobierno reevaluará este jueves las medidas de confinamiento y previsiblemente las extenderá por otras tres semanas, a la espera de que Johnson anuncie, en un discurso previsto para este domingo, la relajación de algunas restricciones que podrían aplicarse a partir del lunes siguiente.
Según la prensa local, el 'premier' podría anunciar que se permitirá a algunos sectores económicos reanudar su actividad y que los ciudadanos puedan salir más de una vez al día a hacer deporte.
Downing Street ha reconocido que la paralización de la actividad debido a la pandemia está teniendo un 'gran impacto' en la economía, pero precisó que este efecto podría ser incluso peor si se produce un repunte de los contagios.
El Banco de Inglaterra estimó este domingo que la economía británica podría contraerse un 14 % este año, lo que supondría la mayor caída desde que comenzaron los registros.
Además, la entidad no descartó que la tasa del desempleo, que actualmente está en el 3,9 %, llegue al 9 % en el segundo trimestre del año por el impacto de las medidas de confinamiento.
De acuerdo con las cifras divulgadas este miércoles, la cifra total de fallecidos por COVID-19 en el Reino Unido es de 30.076 y hay 201.101 personas contagiadas, por lo que se mantiene como el país más castigado de Europa.