Hollywood y el mundo del espectáculo de Estados Unidos tendieron este miércoles la alfombra roja para dar su bendición al nuevo presidente del país, Joe Biden, con una espectacular gala televisiva que contó con sabor latino y en donde no hubo rastro del ya exmandatario Donald Trump.
Enfrentamientos, broncas y reproches. Ese es el agrio resumen de la relación entre los famosos de la música y el cine en EE.UU. con Trump en los últimos cuatro años.
Pero hoy pasaron página y optaron por mirar al futuro con esperanza de la mano de Joe Biden como presidente y de Kamala Harris como vicepresidenta, a quienes respaldaron durante la campaña electoral con un cierre de filas prácticamente sin fisuras.
Optimismo 'made in hollywood'
Bajo el título 'Celebrating America (Celebrar Estados Unidos), la gala, retransmitida por todas las cadenas importantes del país con la notable excepción de Fox, abrazó sin complejos el patriotismo estadounidense de las grandes ocasiones y apeló a la unidad, la concordia y el optimismo tras la era Trump.
Y nadie en Hollywood simboliza mejor ese puente entre opuestos que Tom Hanks, un actor reverenciado en cada esquina de Estados Unidos.
'Las últimas semanas, y los últimos años, hemos sido testigos de profundas divisiones y de un preocupante rencor en nuestra tierra', dijo.
'Esta noche, reflexionamos sobre Estados Unidos: la práctica de nuestra democracia, los fundamentos de nuestra república, la integridad de la Constitución, la esperanza y los sueños que todos compartimos en busca de una Unión más perfecta', añadió.
Bruce Springsteen fue el encargado de descorchar la velada desde el Monumento a Lincoln en el corazón de la capital del país.
'Buenas noches, EE.UU. Estoy orgulloso de estar aquí en el frío Washington', afirmó 'El Jefe' antes de interpretar 'Land of Hope and Dreams' a solo unos cientos de metros del Capitolio que fue asaltado hace dos semanas por ultraderechistas partidarios de Trump.