Con un recuento de los votos agónico y ajustado, que amenaza con prolongarse por varios días antes de que se pueda contar con un resultado oficial, las elecciones peruanas permiten sin embargo extraer ya algunas conclusiones sobre la situación política, social y económica del país.
Un abismo separa los grandes centros urbanos de la costa del Pacifico del resto del país. El 'antifujimorismo' es la expresión política más consistente y extendida de Perú. La solidez del sistema electoral es firme, y el voto exterior es y será determinante en el resultado.
También parece claro que quien salga elegido lo hará con una legitimidad endeble y estará forzado a tender puentes tras una campaña extremadamente polarizada que ha dejado al país tajantemente dividido.