Con citaciones en comisaría, interrogatorios y otros métodos las autoridades cubanas tratan de evitar que los ciudadanos críticos se unan a la ilegalizada marcha del 15 de noviembre, denunciaron este jueves activistas y organizaciones.
'Creo que no ha habido un activista a quien no hayan ido a tocarle la puerta con una citación policial, una amenaza, chantaje o una sugerencia de que se vaya de viaje. En cada caso particular han buscado la manera de persuadirlo para que no salga el 15N', declaró la activista Carolina Barrero.
Conocida por su postura abiertamente crítica contra el régimen cubano, esta curadora e historiadora del arte asegura llevar más de 200 días bajo arresto domiciliario, con agentes del Departamento de Seguridad del Estado (DSE, órgano de inteligencia y contrainteligencia) apostados 24 horas frente a su portal para impedirle salir a la calle.