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El Gobierno británico planea establecer fuertes restricciones de movimiento a los solicitantes de asilo, similares a las que aplica Grecia, para atajar la crisis migratoria, revela este sábado el periódico 'The Daily Telegraph'.

La ministra británica de Interior, Priti Patel, estudia esta posibilidad, que podría aplicarse en unos nuevos centros para albergar a los migrantes que llegan a las costas inglesas tras cruzar en pequeños botes las aguas del Canal de la Mancha.

Los solicitantes de asilo, según la información, estarían obligados a cumplir unas reglas determinadas, de lo contrario pueden perder el derecho a conseguir el asilo en el Reino Unido.

La ministra busca copiar el modelo que ha utilizado Grecia, donde se sigue de cerca el movimiento de los migrantes para impedir que puedan huir de estos centros de retención.