Shanghái, la ciudad más poblada de China con 24 millones de habitantes, comienza este lunes un confinamiento escalonado en dos fases que se prolongará hasta el 5 de abril para atajar el peor rebrote registrado en la ciudad desde que comenzó la pandemia de covid-19.
Aunque se ha dividido en dos periodos, se trata del mayor confinamiento de población en un núcleo urbano desde el inicio de la crisis sanitaria y se espera que el parón de la megalópolis también repercuta tanto en la economía china como en la internacional por su estatus de centro financiero y logístico.
Los distritos que quedan al este del río Huangpu -que divide la ciudad- entrarán en confinamiento a partir de este lunes y hasta el 1 de abril, fecha en la que tocará el turno a los distritos situados al oeste del río, hasta el 5 de abril.
Durante la cuarentena, los residentes deberán permanecer en sus hogares y el transporte público, incluidos los taxis, quedará suspendido.