El representante interino de Estados Unidos ante la Organización de Estados Americanos (OEA), Bradley A. Freden, pidió al organismo 'otras respuestas' tras la ocupación de su oficina en Nicaragua por parte de las fuerzas de seguridad del país.
'No podemos encogernos de hombros y mirar hacia otro lado', dijo Freden durante la última reunión del Consejo Permanente de la OEA, en la que se discutió sobre la ocupación del inmueble a petición del secretario general de la organización, Luis Almagro.
Sin entrar en detalles, el estadounidense advirtió de que el organismo no debe tener miedo de 'aplicar las normas' en casos como el de Nicaragua, que sigue sujeta a sus obligaciones hasta 2023, después de haber solicitado su salida de la OEA en noviembre pasado.
La condena a la ocupación del inmueble fue unánime entre los miembros del organismo.
'Es una afrenta a toda Latinoamérica', dijo el secretario general, Luis Almagro. Para el uruguayo, la decisión del gobierno de Ortega de decomisar el edificio, que pasará a albergar un 'museo de la infamia', sienta un precedente peligroso en la región.
En la misma línea, el representante permanente de Uruguay ante la OEA, Washington Abdala, advirtió de que el camino emprendido por las autoridades nicaragüenses 'no tiene final'.