Los paraguayos se despidieron este domingo del fiscal Marcelo Pecci, víctima de un atentado por parte de desconocidos en Colombia, y quien ahora es símbolo de la lucha contra el crimen organizado y el narcotráfico en su país.
Una extensa caravana de vehículos acompañó la carroza fúnebre por los lugares más cercanos a los afectos del fiscal, que murió el pasado martes en una playa de Colombia, donde pasaba junto a su esposa, Claudia Aguilera, en su luna de miel.
La primera parada del cortejo fue el estadio del club favorito del funcionario, el Guaraní.
Allí las banderas paraguayas se mezclaron con los estandartes oro y negro del conjunto de Asunción.
Hinchas luciendo camisetas del equipo y ondeando pañuelos blancos saludaron con cánticos el paso del féretro de Pecci, cuyo cuerpo llegó el sábado a territorio paraguayo tras ser trasladado en una aerolínea comercial desde Cartagena de Indias con escala en Panamá.